La NFL 2023 aún no dará inicio, pero antes de dar inicio la temporada regular, algunos medios han revelado que posiblemente Tom Brady es buscado para ser el reemplazo de un importante QB por lesión; pero muchos aficionados se han preguntado si el GOAT volverá a los emparrillados.
Tom Brady le puso final a su carrera “para siempre” de los campos de futbol, y con ello se puso fin a una carrera exitosa de 23 en la NFL; en donde la cual el mariscal de campo más ganador de los emparrillados, pudo hacerse con hasta siete Super Bowls y además sumó numerosos récords. Pero ahora con la lesión de este importante QB el regreso del ex jugador de Tampa Bay puede estar más cerca de lo pensado.
El posible retorno de Tom Brady podría darse en la temporada 2023 de la NFL, puesto que un importante QB de la National Football League podría hacer que este movimiento se vuelva un hecho y con ello veremos por lo menos una temporada más al más ganador de la NFL, quien al parecer vuelve del retiro.
El QB que se lesionó y por el cual Tom Brady estaría cerca es de Jimmy Garappolo, quien no pasó su examen físico y con ello Las Vegas Raiders podrían separarse de él; y la lista de candidatos para poder reemplazarlo ha estado cobrando fuerza entre los seguidores de GOAT, quienes sueñan con el retorno del mítico mariscal de campo de los Patriots.
El recién retirado de mariscal de campo quien le puso final a su carrera el año pasado, es quien encabeza en la lista de los favoritos para poder reemplazar a Garappolo. Sin embargo, para que puedan comprar a Tom quien estaría considerando vestirse de plateado y negro, tendría un obstáculo, el cual retrasaría su aventura de propiedad, puesto que las reglas de la liga pueden complicar su doble función.
La lesión que sufre Jimmy Garappolo es en su pie izquierdo, y esto lo obligó a someterse a una cirugía en el mes de marzo pasado; esto podría disminuir su capacidad para jugar en la temporada 2023, y con ello la posibilidad para la que se han preparado en Las Vegas Raiders.
Pero en su contrato se puede leer que el jugador entiende que tal condición ha disminuido su capacidad para jugar futbol profesional americano, y que continuar jugando en los emparrillados puede resultar en el deterioro, y el agraviamiento o una nueva lesión de las condiciones existentes que hacen que el QB sea incapaz físicamente de poder jugar en la NFL.