Durante el carnaval de Notting Hill, que se celebró entre el 27 y el 28 de agosto en Londres (Reino Unido), se registraron varios episodios de violencia que dejaron ocho apuñalados —uno de ellos se encuentra en estado crítico—, 308 detenidos y 75 policías agredidos, informan medios locales.
Una serie de fotografías del evento muestran a personas armadas con machetes enzarzadas en peleas callejeras en medio de una multitud a plena luz del día, incluidas las de un joven encapuchado que amenaza con un arma blanca de grandes dimensiones.
La Federación de la Policía Metropolitana, que representa a los agentes de base, ha denunciado que los uniformados fueron objeto de agresiones de todo tipo, incluyendo patadas, puñetazos, escupitajos y cabezazos, lo que calificó de “absolutamente repugnantes”.
Además, asegura que tiene constancia de seis incidentes en los que los agentes fueron mordidos, así como de una agresión sexual contra una policía y otro en el que un uniformado resultó gravemente herido y tuvo que ser hospitalizado.
Por su parte, los organizadores del evento condenaron este martes los actos de violencia, señalando que los autores de los hechos “no tienen nada que ver con el carnaval de Notting Hill ni con sus valores”.
Durante el carnaval del año pasado, una persona perdió la vida y otras 74 resultaron heridas, incluidos 34 policías. Además, varias mujeres fueron víctimas de agresión sexual, entre ellas una agente.
El carnaval se lleva a cabo en las calles del distrito londinense de Notting Hill desde 1966, y se originó para mostrar la unidad cultural después de una serie de ataques por motivos raciales contra los antillanos en el oeste de Londres.