La República Dominicana está lista para reiniciar un canal fuera de servicio en un río compartido con el vecino Haití, dijo el jueves, semanas después de cerrar la frontera para detener la construcción de otro canal en el lado haitiano que, según afirma, viola un tratado.
Santo Domingo cerró su frontera a mediados de septiembre, cortando el movimiento de personas y el comercio por tierra, aire y mar, citando la construcción por parte de privados de un canal en el río Masacre en el lado haitiano de la frontera en el área de Dajabón.
El jueves, el gobierno dominicano dijo que su autoridad de agua INDRHI había completado las pruebas de tres motobombas instaladas en el sitio de toma y que el canal La Vigía, desmantelado en 2007, estaba listo para reanudar sus operaciones en Dajabón.
Haití, que enfrenta una crisis humanitaria impulsada por guerras entre pandillas, ha dicho que según el tratado tiene derecho a explotar recursos en su lado de la frontera. Los países tienen relaciones tensas con la República Dominicana, que deporta a decenas de miles de inmigrantes a Haití.
El presidente dominicano, Luis Abinader, que busca la reelección el próximo año, también ha dicho que su país está planeando la construcción de dos represas que “sin el tratado podrían afectar significativamente” a Haití.
La Organización de Estados Americanos ha pedido la reanudación del diálogo diciendo que la situación actual no beneficia a ninguna de las partes.
“No cabe duda de que Haití y República Dominicana tienen iguales derechos de uso sobre el río Dajabón o Masacre y que sus recursos hídricos son vitales para ambos, dadas las necesidades de sus habitantes, especialmente en el actual contexto de sequía”, afirmó. dijo la OEA en un comunicado la semana pasada.