La visita del líder chino Xi Jinping a Serbia, aliada europea, coincide con una fecha simbólica: el 25º aniversario del bombardeo de la embajada china en Belgrado durante la guerra aérea de la OTAN sobre Kosovo.
Aviones estadounidenses lanzaron cinco bombas sobre el complejo de la embajada china en la capital serbia el 7 de mayo de 1999, incendiándola y matando a tres ciudadanos chinos. Otras veinte personas resultaron heridas en el atentado, que desde entonces ha afectado las relaciones entre las dos potencias.
Xi Jinping se refirió al bombardeo en un artículo de opinión publicado en el periódico serbio Politika diciendo que no debemos olvidar que hoy hace 25 años, la OTAN bombardeó descaradamente la embajada china en Yugoslavia, según traducciones difundidas por los medios estatales chinos.
La alianza militar occidental había lanzado la guerra aérea en marzo de ese año para obligar al entonces hombre fuerte serbio Slobodan Milosevic a poner fin a un ataque brutal contra los rebeldes de etnia albanesa en Kosovo.
En ese momento, Estados Unidos se disculpó y dijo que el atentado con bomba en la embajada fue un error que ocurrió debido a una inteligencia defectuosa.
Beijing se opuso a la campaña de bombardeos de la OTAN y desde entonces ha respaldado el intento de Belgrado de contrarrestar el intento de independencia de Kosovo, una antigua provincia serbia, respaldada por Occidente. A cambio, Serbia ha sido un aliado leal de Beijing y ha abierto sus puertas sin restricciones a miles de millones de dólares de inversión china, incluso cuando busca formalmente ser miembro de la UE.
“La amistad forjada con sangre entre los pueblos de China y Serbia se ha convertido en la memoria común de los dos pueblos e inspirará a ambas partes a avanzar juntas”, escribió Xi Jinping. “Estamos dispuestos a trabajar con nuestros amigos serbios para mantenernos fieles a nuestras aspiraciones originales, unirnos en el progreso, escribir un nuevo capítulo en el desarrollo y la revitalización nacional y construir una comunidad China-Serbia con un futuro compartido para la humanidad en la nueva era.
Los aviones MiG-29 de la fuerza aérea de Serbia escoltaron el avión presidencial de Xi Jinping hasta el aeropuerto de Belgrado.
Xi Jinping llegó desde Francia y posteriormente viajará a Hungría como parte de su primera gira europea en cinco años.
Se espera que visite el lugar de la antigua embajada y presente sus respetos a las víctimas del bombardeo. En el lugar donde una vez estuvo ubicada la embajada se encuentra ahora un centro cultural chino.