La Armada de Reino Unido ha completado la construcción de una nueva base de operaciones en el Ártico, en el norte de Noruega, la cual “dará apoyo a los comandos británicos durante los próximos diez años”, informó este miércoles la Marina Real.
Según detalló la institución, la nueva base, bautizada como Camp Viking, “servirá de centro neurálgico para los Royal Marines Commandos”, una unidad de combate británica especializada en condiciones climáticas de frío extremo.
El nuevo campamento, estratégicamente situado junto a una base de las Fuerzas Armadas noruegas, tiene la capacidad de alojar a todo el personal de un grupo de Respuesta Litoral, compuesto por 250 marines.
De acuerdo a la Armada, la ubicación del Camp Viking es “ideal para disuadir amenazas en la región y está situada de modo que el Reino Unido pueda responder rápidamente, en caso de ser necesario, para proteger el flanco norte de la OTAN y a su estrecho aliado, Noruega”.
El comandante Kirk Allen, oficial al mando del despliegue militar, señaló que estas instalaciones son el “punto focal para brindar entrenamiento de montaña y de guerra en un clima frío”, y que funcionará como una base de operaciones avanzada para apoyar las operaciones de la OTAN.