El ex dirigente del sindicato de Pemex aún está registrado como trabajador en una Refinería y se le pagaron 1.2 millones de pesos en 2020.
El caso de Carlos Romero Deschamps, es emblemático. A finales de 2019 abandonó la dirección del sindicato petrolero, pero continuó teniendo ingresos a expensas de Petróleos Mexicanos (Pemex).
Entre enero y diciembre del año pasado cobró un millón 208 mil 843 pesos netos como jefe de departamento u homólogo en la Refinería Miguel Hidalgo, de acuerdo con la última declaración patrimonial que presentó en enero de 2021 ante la Secretaría de la Función Pública (SFP).
En la plataforma Nómina Transparente de la SFP, el “sueldo neto estimado” de Romero Deschamps asciende a 28 mil 636.50 pesos mensuales. Sin embargo, considerando las compensaciones, bonos, aguinaldos y otras prestaciones y beneficios que percibió por cargo público, su salario mensual proporcional fue de 100 mil 737 pesos.
Además de la “remuneración anual neta” por cargo público, en 2020 el ex secretario general del Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana (STPRM) se embolsó 162 mil 18 pesos por actividades financieras correspondientes a rendimientos o ganancias obtenidas a través de fondos de inversión, así como 210 mil pesos netos “por enajenación de bienes”, que corresponden a la venta de un vehículo particular.
De acuerdo a la información, Romero Deschamps tiene como función principal un cargo administrativo sin que haya registro o clasificación de su empleo, cargo o comisión. Incluso, en el apartado de puesto en la plataforma Nómina Transparente aparece la leyenda “clasificación pendiente”.
En la última declaración patrimonial de Romero Deschamps, el aún funcionario público de Pemex Refinación registró la baja por venta de dos vehículos comprados de contado: un Acura TSX modelo 2010 con un valor de adquisición de 441 mil 529 pesos, así como una camioneta GMC Yukon Denali del año 2013, cuyo valor de adquisición fue de 744 mil 500 pesos.
Este asunto es emblemático y deja de relieve la debilidad del sistema de justicia de México, ya que, por años se le ha señalado de fraude, desvío de recursos públicos, enriquecimiento ilícito, lavado de dinero y otros delitos.
En el actual sexenio la Fiscalía General de la República (FGR) abrió 12 carpetas de investigación en su contra, de las cuales sólo quedan tres.
Romero Deschamps fue durante 26 años un hombre clave en Pemex. Desde su posición como líder petrolero fue acusado de participar en los gobiernos priistas y panistas en supuestos desvíos de recursos para campañas, en el descuido en las operaciones que llevaron a la petrolera a producir cada vez menos, y en su última etapa de poderío apoyó reformas cuestionadas como la Energética, cuya aprobación ha sido vinculada con el presunto pago de sobornos en la trama de Odebrecht en México.
A la par de sus funciones como dirigente sindical, ha sido dos veces Senador de la República (1994-2000 y 2012-2018) y tres veces Diputado federal (1979-1982, 1991-1994 y 2000-2003) bajo las siglas del Partido Revolucionario Institucional (PRI).