El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Jake Sullivan, y el jefe de la diplomacia china, Wang Yi, mantuvieron reuniones durante dos días en Viena, en un foro en el que han tratado temas bilaterales e internacionales -incluida la guerra en Ucrania- y con el que aparentemente intentan pasar página a la crisis abierta por los supuestos globos espía.
Las conversaciones, confirmadas por la Casa Blanca, están consideradas el encuentro de mayor nivel entre las dos potencias desde que las fuerzas estadounidenses derribaron a principios de febrero un globo chino.
El diálogo, que se produjo entre el miércoles y el jueves, fue “sincero, sustancial y constructivo”, en opinión de la oficina de Joe Biden. Entre los temas tratados, la Casa Blanca incluyó “la guerra de Rusia contra Ucrania” y las tensiones en torno a Taiwán.
Según Washington, las dos partes se comprometieron a “mantener abiertas las líneas de comunicación”, en línea con lo conversado en noviembre por sus respectivos presidentes Joe Biden y Xi Jinping, que coincidieron en la cumbre de líderes del G20 celebrada en en Bali, Indonesia.