Los teléfonos móviles, las tabletas y los relojes inteligentes estarán prácticamente prohibidos en las aulas de los Países Bajos a partir del 1 de enero de 2024, según anunció el martes el gobierno, en un intento de limitar las distracciones durante las clases.
Los dispositivos sólo se permitirán si son específicamente necesarios, por ejemplo durante las lecciones sobre competencias digitales, por razones médicas o para personas con discapacidad.
“Aunque los teléfonos móviles forman parte de nuestras vidas, no deben estar en las aulas, los alumnos deben de concentrarse, además de la oportunidad de estudiar bien, debemos protegerlos de la molestia que son los teléfonos móviles”, dijo el ministro de Educación, Robbert Dijkgraaf.
La prohibición es fruto de un acuerdo entre el ministerio, los centros escolares y las organizaciones afines. Los colegios podrán buscar su propio modo de organizar la prohibición, dijo Dijkgraaf, pero habrá nuevas normas legales si esto no da suficientes resultados para el verano boreal de 2024.
Un sondeo realizado entre miembros del sindicato docente AOb mostró que la mayoría estaba a favor de la prohibición. Aunque la cifra solo ronda el 55% entre profesores de primaria, sube al 73% entre maestros de secundaria, según el sondeo que encuestó a 8.400 docentes.
“Nuestros miembros afirman que los teléfonos móviles tienen un efecto perjudicial en la capacidad de concentración de los alumnos. Y eso, a su vez, afecta a la eficacia de la enseñanza”, Jelmer Evers, responsable de educación secundaria de AOb, según repasó el portal DutchNews.
En cuanto a los que se expresaron en contra del veto, manifestaron que preferían que las escuelas o ellos mismos mantengan la decisión sobre las políticas del uso del dispositivo. En ese sentido, un sondeo entre directores de escuelas mostró que la mayoría estaba en contra del veto y preferían ser ellos los que decidan las reglas.