Un número indeterminado de migrantes ha sido alojado en un barco anclado frente a la costa de Dorset, en el sur de Inglaterra, donde el Gobierno británico tiene previsto mantener a unos 500 solicitantes de asilo, según informes locales.
Los primeros migrantes, cuya cantidad no ha sido precisada, ya se encuentran a bordo de la barcaza de tres pisos y compuesta por 222 camarotes, que lleva el nombre de Bibby Stockholm.
El objetivo del Gobierno del Reino Unido es utilizar esta barcaza como alojamiento para los solicitantes de asilo durante un periodo de 18 meses, en un esfuerzo por reducir los gastos que actualmente enfrenta en hoteles para hospedar a los recién llegados.
Sin embargo, esta medida ha generado críticas por parte de organizaciones humanitarias y entidades locales del condado de Dorset.
Según estimaciones, las autoridades locales gastan alrededor de seis millones de libras (aproximadamente 6.96 millones de euros) al día para alojar a los migrantes que se encuentran en situación irregular en hoteles.
La logística para el Bibby Stockholm enfrenta críticas debido a la intención de alojar a medio millar de inmigrantes, cuando la barcaza, que había sido empleada, entre otros, por trabajadores del sector del gas y del petróleo, tiene capacidad para 222 personas.
El aumento es posible si se instalan literas y se reconvierten áreas comunales en dormitorios para albergar a entre seis y ocho personas. La previsión, por ahora, es trasladar hombres de entre 18 y 65 años que estén en la última fase de su solicitud de asilo y el máximo que podrán permanecer son nueve meses.
El director de los derechos de migrantes y refugiados de Amnistía Internacional (AI), Steve Valdez-Symonds, expresó su desacuerdo con la medida y la calificó como “una forma completamente vergonzosa de albergar a personas que han huido del terror, el conflicto y la persecución.”
Valdez-Symonds también advirtió sobre el posible trauma que podría generar alojar a personas en una barcaza flotante como esta, considerando la difícil situación y experiencias que han enfrentado estos migrantes en sus países de origen.