El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, celebró el miércoles su tan ansiada reunión con el presidente Joe Biden, la primera desde que Netanyahu asumió el mando del gobierno de extrema derecha de su país a fines del año pasado.
Ambos mandatarios se reunieron en Nueva York con motivo de la Asamblea General de Naciones Unidas, su primer encuentro desde que Netanyahu volvió al poder y tras meses de tensiones entre la Administración de Biden y el Gobierno de Israel, con gran peso de los ultraconservadores.
“Bajo su liderazgo, señor presidente, podemos forjar una paz histórica entre Israel y Arabia Saudí”, afirmó Netanyahu al inicio de la reunión en un hotel de Nueva York.
Dada la relación cercana entre Israel y Estados Unidos, los líderes de ambos países suelen mantener reuniones relativamente pronto, en los primeros meses en que uno de ellos asume el poder; pero, en este caso, el encuentro se produjo ocho meses después.
La relación se ha suavizado porque ambos Gobiernos comparten el interés para una normalización entre Israel y Arabia Saudí, pero Biden también sacó a relucir en la reunión el asunto de la reforma judicial, que anula la capacidad del Supremo de revocar decisiones gubernamentales en base a si éstas son razonables o no.
Pese a las diferencias, Biden remarcó que su compromiso con Israel es “férreo” ya que Estado es “esencial” para la seguridad de los judíos en todo el mundo.
Ante las críticas por la reforma judicial, Netanyahu prometió que “el compromiso de Israel con la democracia nunca cambiará”.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, afirmó este miércoles en una reunión con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, que un potencial acuerdo para formalizar relaciones entre israelíes y saudíes facilitaría la paz con los palestinos.
Por su parte, el mandatario estadounidense expresó su esperanza de que termine con éxito la negociación para el establecimiento de relaciones diplomáticas entre Israel y Arabia Saudí, al tiempo que pidió una solución de dos Estados para el conflicto israelí-palestino.
Biden coincidió en que la formalización de lazos entre el Estado judío y el reino saudí sería un hito histórico e incluso bromeó al respecto: “Si hace diez años estuviéramos hablando de la normalización con Arabia Saudí, creo que nos miraríamos diciendo ‘¿quién ha estado bebiendo?¡”. Tres años después de los Acuerdos de Abraham, que normalizaron los lazos de Israel con varios de sus vecinos árabes, Netanyahu está cortejando a Arabia Saudí para normalizar sus relaciones, con el apoyo de EE.UU.
El regreso al poder de Netanyahu en diciembre pasado tensó la relación con la Casa Blanca por la reforma judicial de Israel, vista como una amenaza a la democracia, y la espiral de violencia con los palestinos, así como la expansión de asentamientos en Cisjordania ocupada.
La Autoridad Nacional Palestina (ANP) ha pedido a Arabia Saudí que arranque concesiones a Israel a favor de la causa palestina en esta negociación.