En Irán se ha frustrado un complot con el fin de perpetrar 30 atentados terroristas simultáneos en zonas densamente pobladas de Teherán, anunció este domingo el Ministerio de Inteligencia del país, citado por la agencia Tasnim.
De acuerdo con el organismo, en los últimos días sus fuerzas llevaron a cabo una serie de operaciones en las provincias de Teherán, Alborz y Azerbaiyán Occidental, y como resultado detuvieron a todos los implicados, 28 terroristas vinculados al Estado Islámico.
Además, se indica que algunos de ellos habían combatido anteriormente junto a terroristas takfiríes (extremistas de una ideología islamista radical que tachan de ‘infieles’ a otros grupos de musulmanes) en Siria u operado en Afganistán, Pakistán y el Kurdistán iraquí.
El Ministerio reveló que, durante una de las operaciones en una casa, los terroristas intentaron llevar a cabo una autodetonación que podría haber herido a los civiles que viven en las viviendas cercanas. Sin embargo, los miembros del servicio lo impidieron, y dos de ellos resultaron heridos.
Se señala que el objetivo de los terroristas fue “socavar la seguridad de Irán, mostrar una falsa imagen de inestabilidad en Irán, fomentar la decepción y el terror en la sociedad y provocar el caos”.
El Ministerio añadió que los atentados también pretendían causar protestas en el aniversario de los disturbios antigubernamentales del año pasado, provocados por la muerte de la joven Mahsa Amini, quien falleció poco después de ser detenida por la denominada ‘Policía de la moralidad’, al vestir su hiyab incorrectamente.
Durante las operaciones de los agentes del servicio, se confiscaron armas y equipos a los terroristas, entre ellos enormes cantidades de explosivos, bombas, grandes cantidades de materiales para artefactos explosivos, dispositivos electrónicos utilizados en bombas de relojería, 17 pistolas y cartuchos de fabricación estadounidense, diversos dispositivos de telecomunicaciones inteligentes y por satélite, uniformes militares, chalecos suicidas, entre otras cosas.