Transportistas de la Ruta 84 salieron a las calles en una serie de manifestaciones a modo de protesta por la implementación del corredor de transporte “Autobuses Barrios Culhuacán S.A. de C.V.” como reemplazo de las rutas concesionadas.
Dicho enfrentamiento, que comenzó a las 9:00 horas del día de este martes, generó tensión y controversia en torno al proceso de modernización del transporte público en la metrópolis.
El punto de discordia principal radica en que, de acuerdo con los transportistas, la nueva empresa los excluyó como accionistas sin ofrecerles una compensación o liquidación justa.
Además, pidieron la renuncia del secretario de Movilidad, Andrés Lajous, al que acusan de represalias y enriquecimiento ilícito. Estas demandas se suman a una serie de preocupaciones sobre el proceso de transición y sus consecuencias en el empleo y los derechos de los transportistas tradicionales.
Al respecto, la Secretaría de Movilidad (Semovi) emitió un llamado a los manifestantes para continuar con las mesas de diálogo en busca de soluciones que permitan la integración al proyecto de la empresa zonal Culhuacanes. Además, sostuvo que el proceso de implementación, que se puso en marcha en 2022, ha seguido un camino transparente y basado en las regulaciones pertinentes.
La Semovi subrayó que esto mejorará la experiencia de los usuarios y la calidad del servicio:
“La modernización del transporte público es una prioridad para el Gobierno de la Ciudad, por eso, en la zona de Culhuacanes se chatarrizarán más de 180 microbuses que darán paso a 76 autobuses de última generación. Con esto, además, se erradican malas prácticas que afectan a las personas usuarias del transporte público, como el “tortuguismo”, ascensos y descensos en sitios no autorizados, y competencia desleal entre operadores”, afirmó.
En respuesta a las acusaciones de irregularidades en la adquisición de los autobuses, Semovi enfatizó que fueron los propios transportistas quienes seleccionaron la marca y el modelo de los vehículos, cumpliendo con todas las normativas técnicas vigentes. Esto contradice la existencia de un supuesto “cártel del transporte” y refuerza la intención de no dejar sin empleo a aquellos que poseen concesiones.
Finalmente, negó que existan irregularidades en el proceso de modernización, mismo que ha sido llevado de manera transparente con todas las personas concesionarias interesadas en ofrecer un servicio de calidad, alejado de intereses particulares que no benefician a las y los usuarios.
Estos acontecimientos desencadenaron protestas de transportistas en diversos puntos de la ciudad, incluyendo Tlalpan y General Anaya, la salida de Cuernavaca, Tláhuac y Periférico, Ermita y Periférico, y Calzada Ignacio Zaragoza y Periférico. Las autoridades recomendaron a los ciudadanos tomar precauciones debido a estas manifestaciones, que podrían afectar la movilidad en la ciudad en los próximos días.
Cabe señalar que las protestas en Calzada de Tlalpan fueron encabezadas por el “Sindicato Libertad” y no por transportistas de la capital del país.
El conflicto entre los transportistas y las autoridades de la Ciudad de México refleja las tensiones latentes en torno a la modernización del transporte público y el reemplazo de rutas concesionadas por un nuevo corredor de transporte. Mientras las manifestaciones continúan, las autoridades instan a las partes involucradas a encontrar soluciones equitativas que beneficien a todos los ciudadanos y mejoren la eficiencia del servicio de transporte en la metrópolis.