Al menos 60 personas han sido detenidas y más de veinte han resultado heridas en el aeropuerto de Majachkalá, la capital de la república rusa de Daguestán, de mayoría musulmana, donde este domingo una muchedumbre se lanzó en busca de israelíes y judíos.
Entre los heridos se encuentran nueve policías, dos de los cuales tuvieron que ser hospitalizados.
Ante la llegada de vuelos procedentes de Israel, cientos de personas tomaron el aeropuerto y la pista de aterrizaje tras llamamientos en canales de Telegram, para revisar los vuelos y automóviles en busca de israelíes y judíos, en protesta por el conflicto entre Israel y Hamás.
De acuerdo con medios rusos la turba gritó consignas antisemitas y “Allahu Akbar” (Alá es grande). También se escucharon disparos.
Tras varias horas de disturbios en el aeropuerto, las fuerzas de seguridad lograron despejar las instalaciones.
La Agencia Federal de Transporte Aéreo ordenó inicialmente el cierre del aeropuerto hasta el próximo 6 de noviembre, pero finalmente, la medida regirá solo hasta hoy martes.
Putin acusó a Ucrania y a los servicios secretos occidentales de instigar los disturbios antisemitas que estallaron el domingo por la noche en la república norcaucásica de Daguestán.
Afirmó Putin que los sucesos ocurridos en Majachkalá fueron instigados en redes sociales, de la mano de servicios secretos occidentales; incluida Ucrania. Por lo tanto el mandatario hizo un llamado a sus fuerzas de seguridad para garantizar el orden constitucional y defender la concordia étnica y religiosa en la sociedad rusa.
Acusó a Kiev de permanecer bajo la dirección occidental, e intentar pogromos en Rusia.
El Gobierno de Israel afirmó este lunes que espera que las autoridades rusas velen por el bienestar de todos los ciudadanos israelíes y judíos dondequiera que estén, tras los disturbios en el aeropuerto de Daguestán.
Benjamín Netanyahu, y del titular de Exteriores, Eli Cohen instaron a los responsables políticos a adoptar acciones contundentes contra los alborotadores de esta incitación salvaje contra israelíes y judíos.
El embajador ruso en Israel, Alex Ben Zvi, trabaja con las autoridades de Moscú para asegurarse de que los judíos e israelíes se encuentran bien, mientras la oficina del primer ministro, del titular de Exteriores y el Consejo de Seguridad Nacional de Israel siguen el desarrollo de los acontecimientos.
Para la comisionada de Derechos Humanos de Rusia, Tatiana Moskalkova, ha asegurado que lo sucedido en el aeropuerto tiene claramente como objetivo incitar al odio étnico y puede conducir a graves violaciones de los derechos humanos.