La ONG Ayuda en Acción presentó en Madrid el primer informe de su Índice de Transiciones en Desventaja (ITeD), que identifica los obstáculos que dificultan el acceso de la juventud al mercado laboral. El estudio concluye que el 42% de los jóvenes latinoamericanos y españoles encuentran dificultades educativas y laborales para integrarse en el mundo laboral. Además, constata que más del 50% de las mujeres jóvenes no habían podido acceder al trabajo en la mayor parte de Latinoamérica a principios de 2020.
Este estudio, revela que solo el 23% de los jóvenes consigue un empleo estable y satisfactorio. Las difíciles transiciones al empleo observadas entre los jóvenes se agravan especialmente por las desigualdades educativas, laborales y de género.
El ITeD señala de manera especial la incidencia de dichas desigualdades en Latinoamérica, donde 60 millones de jóvenes, es decir, un 42% del total de personas de 15 a 29 años, todavía no han iniciado su incorporación al trabajo.
Además, la brecha de género es patente, ya que más del 50% de las jóvenes mujeres no habían accedido al mercado laboral en la mayor parte de la región a principios de la presente década.
La proporción de jóvenes con inserciones laborales exitosas varía según los países. Guatemala, México, El Salvador presentan las tasas más altas, con un 39%, 38% y 37% respectivamente. Siguen Venezuela, Perú y Bolivia, que registran de 34 a 32%. Por el contrario, Chile presenta la tasa más baja, que no alcanza el 20% (ITeD, 2023).
portantes desigualdades a nivel de género. A nivel general, las diferencias entre hombres y mujeres que completaron la transición superan los 15 puntos porcentuales en todos los países, alcanzando hasta 28 puntos en países de América Central, junto a Venezuela y Ecuador.
Este informe identifica que son las jóvenes mujeres de bajos ingresos y áreas rurales las que enfrentan mayor exclusión debido a la distribución desigual del trabajo doméstico y de cuidados, lo que dificulta su acceso a oportunidades laborales.
En relación con la educación, el ITeD destaca que un 11% de jóvenes (15,6 millones) en América Latina está trabajando sin haber obtenido las titulaciones o acreditaciones educativas básicas, es decir, sin haber completado la educación secundaria.
Además, casi 20 millones de jóvenes, un 14% del total, no terminaron la educación secundaria y tampoco iniciaron la transición laboral.