Las autoridades alemanas arrestaron durante la noche de este sábado a un joven de 32 años acusado de planear un presunto ataque terrorista.
Los investigadores detuvieron al sospechoso en la ciudad de Castrop-Rauxel, en la región alemana del Ruhr al noroeste del país, que según ha confirmado la Policía alemana en un comunicado, habría planeado un “atentado de motivación islamista”.
El sospechoso, de nacionalidad iraní, habría adquirido toxinas de cianuro y ricina, una sustancia altamente tóxica, para cometer un atentado, según información del anuncio conjunto de la fiscalía de Düsseldorf, la Policía de Recklinghausen y la Policía de Münster.
Según el Instituto Robert Koch, la ricina figura en la lista de armas de guerra bajo el epígrafe de “armas biológicas”. Se produce a partir de las semillas del ricino y, dependiendo de cómo se ingiera, es mortal transcurridas las 36 a 72 horas. Los síntomas van desde dolores de cabeza a calambres, pasando por insuficiencia hepática y renal.
Durante esta madrugada, las autoridades alemanas allanaron la vivienda del sujeto en Castrop-Rauxel, a unos 15 kilómetros al noroeste de Dortmund y 25 kilómetros al noreste de Essen, con el objetivo de encontrar estas sustancias u otras pruebas incriminatorias.
De acuerdo con el diario Bild, un “servicio de inteligencia amigo” habría advertido a las autoridades de seguridad sobre un posible atentado con una bomba química. Sin embargo, no está claro si existía un objetivo específico para el ataque.
Según notificó la agencia de noticias alemana Dpa, se acordonó una amplia zona alrededor de la vivienda y tuvo lugar un gran despliegue de agentes de Policía, bomberos y personal de rescate.
“El acusado es sospechoso de haber preparado un grave acto de violencia peligroso para el Estado”, indicaron los encargados de la investigación. Las pruebas están siendo evaluadas y el acusado de 32 años y otra persona fueron puestos bajo custodia aunque se desconoce si comparecerán ante un tribunal.
El diario Bild indicó que en 2018, un terrorista islamista también quiso detonar una bomba de ricina en la ciudad de Köln. Junto con su esposa, el tunecino había producido el agente biológico a partir de semillas de ricino y, junto con 250 bolas de acero quería hacer detonar el mortífero artefacto.
El grupo terrorista Estado Islámico había hecho repetidos llamados a sus seguidores para que llevaran a cabo estos devastadores ataques, publicando instrucciones sobre cómo construir bombas biológicas.
Alemania se vio sacudida en los últimos años por varios atentados islamistas, entre ellos un atropello masivo en un mercado de Navidad en diciembre de 2016 que mató a 13 personas.
Este acto “tuvo motivaciones islamistas, según las primeras conclusiones de la investigación”, dijo un portavoz de la fiscalía local.
La prensa publicó que el autor de los hechos fue un iraquí de 30 años que gritó “Allahu akbar” (Alá es el más grande) cuando salió de su vehículo, tras haber chocado voluntariamente contra varios automóviles y motos.