La leyenda de Broadway Chita Rivera, dos veces ganadora del Tony y nueve nominada, murió este martes por la mañana después de una breve enfermedad, según anunció su jefe de prensa. Tenía 91 años.
La actriz, cantante y bailarina dio vida al papel de Anita en la producción de Broadway de Amor sin barreras, así como el personaje principal de El beso de la mujer araña y el papel de Velma Kelly en Chicago.
Como señaló el New York Times al revisar la retrospectiva de su carrera de 2005, Chita Rivera: A Dancer’s Life, el carisma de Rivera residía “en su técnica experta y en el placer contagioso que deriva de ella. Ella siempre ha sido una profesional en un mundo de juicios exigentes y estándares míticos”.
Rivera se veía a sí misma como “una corista que pasó por toda la carrera”. “Creo que puedo hacer frente a cualquier cosa que surja”, dijo.
De hecho, estaba en el camino hacia una carrera de danza clásica cuando en 1952 Rivera acompañó a un amigo a una audición para la producción de Broadway de Call Me Madam. El amigo no consiguió el papel de bailarín principal pero Rivera sí.
Siguió este debut con otras obras, incluidas Can-Can, Seventh Heaven, Mr. Maravilloso y Shinbone Alley.
Su carrera en constante ascenso se disparó en 1957, cuando apareció en West Side Story (Amor sin barreras). Concebida, dirigida y coreografiada por Jerome Robbins, con libreto de Arthur Laurents, música de Leonard Bernstein y letra de Stephen Sondheim.
La producción fue revolucionaria y fusionó una partitura de jazz con una versión urbana y valiente de Romeo y Julieta. Los artistas vestían zapatillas y jeans, chasqueaban los dedos y hablaban en el lunfardo de un barrio de Nueva York.
Rivera cautivó al público con su vibrante actuación como Anita, la mejor amiga de la heroína del programa, María, y novia del hermano de María, Bernardo.