Abuso de fondos públicos. Hospitales fallidos. Baches en las calles de Kampala, capital de Uganda.
Estos y otros temas aparecen en una campaña de protesta en línea que está inquietando a los funcionarios gubernamentales y a otras personas en este país de África Oriental donde las protestas callejeras están prácticamente prohibidas y donde la corrupción está generalizada y a menudo es mortal.
La campaña ha sido tendencia en la plataforma de redes sociales X, como #UgandaParliamentExhibition. Se basa en filtraciones de documentos oficiales y ha sido presentado como una “exposición” –en una secuencia de publicaciones– sobre temas controvertidos.
Las últimas publicaciones, sobre la Asamblea Nacional de Uganda, pretenden revelar detalles sobre el abuso de recursos públicos, el nepotismo en la contratación de personal e incluso la colusión entre funcionarios públicos y legisladores en los comités de supervisión.
También se centran en la presidenta del Parlamento, Anita Among, un miembro influyente del partido gobernante, que es criticada por supuestamente recaudar enormes sumas en concepto de dietas para viajes al extranjero, incluidos viajes que no se realizaron.
La campaña alega que Among recibió el equivalente a 894.500 dólares en viáticos y asignaciones de entretenimiento entre julio y enero, una cantidad asombrosa en un país que lucha por implementar su presupuesto en medio de persistentes déficits de ingresos.
Una comisión parlamentaria que Entre los jefes había aumentado anteriormente las dietas diarias del presidente de 990 dólares a 4.000 dólares. El ingreso anual per cápita en Uganda fue de 850 dólares en 2022, según cifras del Banco Mundial.
El gobierno del presidente Yoweri Museveni, que ocupa el poder en Uganda desde 1986, ha sido acusado durante mucho tiempo de proteger a funcionarios corruptos pero influyentes de procesos penales. Tras su reelección para un sexto mandato en 2021, Museveni prometió tomar medidas enérgicas contra la corrupción.
Los medios de comunicación locales informan con frecuencia sobre temas de corrupción, pero los activistas, figuras de la oposición y otras personas que intentan organizar manifestaciones callejeras se enfrentan a arrestos en virtud de una ley que les exige notificar primero a la policía sus planes de manifestarse. El movimiento de protesta en línea se ha vuelto importante por su capacidad de nombrar y avergonzar a individuos específicos ante una audiencia atenta, dijo Marlon Agaba, jefe del organismo de control de la Coalición Anticorrupción de Uganda.