La situación en materia de seguridad en Baja California Norte se encuentra sumamente deteriorada, a grado tal que políticos como la presidenta municipal de Tijuana, Montserrat Caballero Ramírez, permanece atrincherada en un cuartel de la Guardia Nacional.
Pero no es la única que considera que las cosas se están haciendo mal, ya que representantes de la sociedad civil aseguran que la crisis de seguridad que padece el estado es producto de las estrategias fallidas de la gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda.
Al respecto, Roberto Quijano, Presidente del Consejo Ciudadano Baja California, asegura que la incidencia delictiva no solamente no ha disminuido, sino que ha ido al alza.
Por su parte, Carlos Atilano, de organizaciones independientes del estado, recuerda que Tijuana, Ensenada y Mexicali son de las tres ciudades más violentas y que en el caso de Tijuana, ya encabeza este tema en los últimos meses, con 5 ejecuciones diarias.
Cabe mencionar que en sus apariciones públicas, Marina del Pilar señala que ha destinado miles de millones de pesos al presupuesto de seguridad pública, pero ello no ha permitido que regrese la tranquilidad a los bajacalifornianos.
Roberto Quijano establece una ecuación: si se suman los presupuestos de la Secretaria de Protección Ciudadana, Fiscalía del Estado y Secretaría de Seguridad Pública Municipal, se llega a los 7 mil 500 millones de pesos al año, que es una cantidad bastante importante, y si bien más de la mitad de ese presupuesto se va al sistema penitenciario, el resto del recurso no se ve reflejado en resultados que le den certidumbre a la ciudadanía.
Pero también hay que mencionar que el Gobierno de Baja California Norte no ha logrado engrosar las filas de los cuerpos policíacos porque no ha logrado bajar los índices de violencia.
Así que Marina del Pilar no ha cumplido con una de sus principales funciones, darle certidumbre y seguridad a la gente y ello, se nota y el clamor popular es que ya acabe el martirio de un gobierno que no sabe lo que hace.