Nikki Haley anunció que abandona las primarias republicanas tras sus pobres resultados en la cita del supermartes, pero no expresó su apoyo para el expresidente Donald Trump, único aspirante que queda en pie.“Ahora depende de Donald Trump ganarse los votos de aquellos dentro y fuera de nuestro partido que no lo apoyaron. Y espero que lo haga”, dijo en una comparecencia pública en Charleston, Carolina del Sur.
Haley dio por seguro que el magnate neoyorquino será el candidato del Partido Republicano a la presidencia. Lo felicitó y le deseó lo mejor, pero no cumplió con la tradición de expresar el apoyo al ganador.
“La política se trata de atraer a la gente a tu causa, no de rechazarlos. Nuestra causa conservadora necesita urgentemente a más gente. Este es el momento de que Trump elija”, resumió.
Trump arrasó en catorce de los quince estados del país que celebraron el martes primarias republicanas, mientras que Haley solo pudo cantar victoria en Vermont.
La retirada de Haley allana todavía más el camino para que las elecciones del próximo 5 de noviembre sean una reedición del duelo de 2020 entre Trump y el actual presidente, el demócrata Joe Biden.
Trump se convierte, con la salida de Haley de la contienda de primarias, en el virtual nominado republicano a la presidencia a la espera de la convención del partido en julio.
La exembajadora ante la ONU era la única mujer en las primarias republicanas y la única aspirante que permanecía en pie tras el paso arrollador de Trump.
Haley ha apelado en su campaña a los votantes moderados que no se sienten representados ni por Trump, de 77 años, ni por Biden, de 81 años.
Pero durante este proceso Haley solo ha ganado al expresidente en Vermont y en el Distrito de Columbia. Además de sufrir una derrota humillante en Carolina del Sur, su estado natal y del que fue gobernadora.
Trump conseguirá probablemente cerrar matemáticamente su nominación la próxima semana, mientras que Biden tampoco tardará mucho dado que no tiene rivales en el Partido Demócrata.
El presidente estadounidense, Joe Biden, invitó a los votantes de Nikki Haley a sumarse a su propia campaña tras la retirada de la precandidata republicana, subrayando que lo que está en juego para Estados Unidos no podría ser más importante.
“Trump dejó claro que no quiere el apoyo de los votantes de Nikki Haley. Quiero ser claro: hay un lugar para ellos en mi campaña”, sostuvo el mandatario demócrata.
Haley, en su opinión, estuvo dispuesta a decir la verdad sobre Trump: sobre el caos que siempre lo rodea, sobre su incapacidad para distinguir el bien del mal, sobre su cobardía ante el presidente ruso Vladímir Putin.