La aprobación se dio en la Cámara de Representantes de Colorado, como primera parte antes de llegar al Senado para su aprobación.
La Cámara de Representantes de Colorado, controlada por los demócratas, aprobó un proyecto de ley que prohibiría la venta y transferencia de armas de fuego semiautomáticas, un paso importante para la legislación después de que los demócratas rechazaran rápidamente aproximadamente el mismo proyecto de ley el año pasado.
El proyecto de ley, que fue aprobado con una votación de 35 a 27, ahora está en camino al Senado estatal liderado por los demócratas. Si se aprueba allí, podría alinear a Colorado con otros 10 estados, incluidos California, Nueva York e Illinois, que tienen prohibiciones sobre las armas semiautomáticas.
Pero incluso en un estado plagado de algunos de los peores tiroteos masivos del país, dicha legislación enfrenta vientos en contra.
Las posibilidades de éxito del proyecto de ley en el Senado estatal son menores que en la Cámara de Representantes, donde los demócratas tienen una mayoría de 46 a 19 y un flanco de extrema izquierda más amplio. El gobernador Jared Polis, también demócrata, ha manifestado su cautela ante tal prohibición.
El año pasado, un proyecto de ley similar murió en el comité, y algunos legisladores demócratas expresaron su preocupación por el alcance de una prohibición y las promesas que hicieron a sus electores de evitar que el gobierno se extralimitara y afectara los derechos de la mayoría de los propietarios de armas.
Esas leyes se firmaron meses después de que cinco personas murieran en un club nocturno LGBTQ+ en Colorado Springs el año pasado. Pronto, el estado conmemorará el 25º aniversario del tiroteo en la escuela secundaria Columbine en 1999, que mató a 13 personas. Otros tiroteos masivos en Colorado incluyen 12 personas asesinadas en 2012 en un cine de Aurora y 10 personas asesinadas en 2021 en un supermercado de Boulder.
Los republicanos denunciaron la legislación como una invasión onerosa de la Segunda Enmienda de la Constitución de Estados Unidos. Argumentaron que las enfermedades mentales y las personas que no valoran la vida son los problemas que deben abordarse. Argumentaron que las personas con malas intenciones pueden utilizar otras armas, como cuchillos, para dañar a otros.
Los demócratas respondieron que las armas semiautomáticas pueden causar mucho más daño en un corto período de tiempo.
