Tras la prueba, el líder norcoreano pidió maximizar la producción de lanzadores múltiples de cohetes para lograr un cambio significativo a las capacidades de combate de sus fuerzas.
El líder norcoreano Kim Jong-un supervisó otra prueba de lanzamiento de un nuevo sistema de lanzamiento múltiple de cohetes que el país planea desplegar entre sus fuerzas a partir de este año, dijeron los medios estatales, como parte de su medida para reforzar su línea de armas dirigidas a centros de población de Corea del Sur.
La prueba confirmó la ventaja y el poder destructivo del lanzacohetes múltiple de 240 milímetros y sus proyectiles guiados. El sistema que Corea del Norte ya probó dos veces este año, se desplegará en unidades de combate entre 2024 y 2026 para reemplazar las armas más antiguas.
En los últimos meses, Corea del Norte ha mantenido un ritmo acelerado en las pruebas de armas a medida que amplía sus capacidades militares, mientras que la diplomacia con Estados Unidos y Corea del Sur sigue estancada. Los expertos dicen que el objetivo de Kim Jong-un es eventualmente presionar a Estados Unidos para que acepte la idea de que Corea del Norte sea una potencia nuclear y negocie concesiones económicas y de seguridad desde una posición de fuerza.
Corea del Norte se ha centrado en los sistemas de artillería en las últimas semanas. Sus actividades de prueba incluyeron lanzamientos de salvas de lanzadores múltiples de cohetes de 600 mm en abril que los medios estatales describieron como un contraataque nuclear simulado contra objetivos enemigos.
Corea del Norte también realizó este año varias pruebas de misiles de crucero y probó en vuelo lo que describió como un misil de combustible sólido de alcance intermedio con capacidades de ojiva hipersónica. Los expertos dicen que está diseñado para alcanzar objetivos remotos de Estados Unidos en el Pacífico, incluido el centro militar de Guam.
Tras la prueba, Kim Jong-un emitió instrucciones para maximizar la producción de lanzadores múltiples de cohetes de 240 mm y sus proyectiles guiados, lo que, según dijo, traería un cambio significativo a las capacidades de combate de sus fuerzas, dijo la agencia de noticias norcoreana.
Si bien los sistemas de artillería norcoreanos están diseñados para apuntar a la zona de la capital de Corea del Sur, que alberga a la mitad de los 51 millones de habitantes de ese país, los funcionarios militares surcoreanos también sospechan que las recientes pruebas del Norte tienen como objetivo examinar las armas que planea exportar a Rusia.
Funcionarios estadounidenses y surcoreanos han acusado a Corea del Norte de proporcionar proyectiles de artillería, misiles y otros equipos militares a Rusia para ayudar a extender sus combates en Ucrania.
En los últimos meses, Kim Jong-un ha intentado aumentar la visibilidad de sus vínculos con Moscú y Beijing mientras intenta romper su aislamiento diplomático e insertarse en un frente unido contra Washington.
