Fin de semana de terror vivieron los habitantes de Texas, Oklahoma y Arkansas tras ser azotados por violentas tormentas.
Poderosas tormentas mataron al menos a 15 personas, hirieron a cientos y dejaron un amplio rastro de destrucción en Texas, Oklahoma y Arkansas después de arrasar casas y destruir una parada de camiones donde decenas buscaron refugio en un baño durante el último clima mortal que azotó el centro de Estados Unidos.
Las tormentas causaron sus peores daños en una región que se extiende desde el norte de Dallas hasta la esquina noroeste de Arkansas, y el sistema amenazó con traer un clima más violento a otras partes del Medio Oeste más tarde ese día.
Los meteorólogos dijeron que el mayor riesgo se desplazaría hacia él este inicio de semana, cubriendo una amplia franja del país desde Alabama hasta cerca de la ciudad de Nueva York.
Se reportaron siete muertes en el condado de Cooke, Texas, cerca de la frontera con Oklahoma, donde un tornado arrasó una zona rural cerca de un parque de casas móviles, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, en una conferencia de prensa el domingo. Entre los muertos había dos niños, de 2 y 5 años. Tres miembros de la familia fueron encontrados muertos en una casa, según el sheriff del condado.
En Texas, unas 100 personas resultaron heridas y más de 200 casas y estructuras destruidas, dijo Abbott, sentado frente a una parada de camiones devastada cerca de la pequeña comunidad agrícola de Valley View. El área fue una de las más afectadas, con vientos estimados de 217 kph, dijeron las autoridades.
Varias personas fueron transportadas a hospitales en ambulancia y helicóptero en el condado de Denton, también al norte de Dallas.
Las tormentas también mataron a dos personas y destruyeron casas en Oklahoma, donde entre los heridos se encontraban invitados a una boda al aire libre, cinco personas en Arkansas y una persona en Kentucky. Decenas de miles de residentes se quedaron sin electricidad en toda la región. La destrucción continuó un mes sombrío de clima mortalmente severo en el centro del país.
Los tornados que azotaron Iowa la semana pasada dejaron al menos cinco muertos y decenas de heridos. Los tornados mortales se han generado durante una temporada históricamente mala para los tornados, en un momento en que el cambio climático contribuye a la gravedad de las tormentas en todo el mundo. Abril tuvo el segundo mayor número de tornados registrado en el país.
El mal tiempo dejó sin electricidad a decenas de miles de hogares y negocios en el camino de las tormentas.
A última hora del domingo, más de 80.000 clientes en Arkansas se quedaron sin electricidad. En el vecino Missouri, más de 90.000 personas también se quedaron sin electricidad. Texas reportó 27.000 apagones, mientras que en Oklahoma se reportaron 3.000, según el sitio web de seguimiento poweroutage.us.
Las carreteras inaccesibles y las líneas eléctricas caídas en Oklahoma también llevaron a los funcionarios de la ciudad de Claremore, cerca de Tulsa, a anunciar en las redes sociales que la ciudad estaba “cerrada” debido a los daños.
Se pronosticaron tormentas más severas en Illinois, Missouri, Kentucky y Tennessee. El riesgo de clima severo se traslada a Carolina del Norte y Virginia el lunes, dijeron los meteorólogos.
