La explosión de un tanque de propano en un restaurante en la ciudad de Izmir, en el oeste de Turquía, dejó cinco muertos y 63 heridos, dijeron las autoridades.
Las cámaras de seguridad registraron la explosión, que devastó la calle y causó daños menores a los edificios circundantes.
El ministro del Interior, Ali Yerlikaya, anunció en las redes sociales que decenas de miembros del personal de rescate fueron enviados inmediatamente al lugar.
El gobernador de Esmirna, Suleyman Elban, visitó a los heridos en el hospital y anunció que 40 de ellos ya habían sido dados de alta.
Las autoridades han detenido a un sospechoso que podría ser el responsable. El hombre había sustituido el tanque de propano por uno nuevo el sábado.