Las estampidas mortales son relativamente comunes en torno a los festivales religiosos indios, donde grandes multitudes se reúnen en áreas pequeñas con infraestructura de mala calidad y pocas medidas de seguridad.
Miles de personas en una reunión religiosa en India se apresuraron a abandonar una tienda de campaña improvisada, lo que provocó una estampida que mató a más de 100 y dejó decenas de heridos, dijeron funcionarios.
No quedó inmediatamente claro qué desencadenó el pánico tras un evento con un gurú hindú conocido localmente como Bhole Baba. Los informes de noticias locales citaron a autoridades que dijeron que el calor y la asfixia en la tienda podrían haber sido un factor. El vídeo de lo ocurrido mostró que la estructura parecía haberse derrumbado.
Al menos 116 personas murieron, la mayoría de ellas mujeres y niños, dijo Prashant Kumar, director general de la policía en el estado de Uttar Pradesh, en el norte de India, donde ocurrió la estampida.
Más de 80 personas resultaron heridas y fueron hospitalizadas, dijo el oficial de policía Shalabh Mathur.
“La gente empezó a caer unos sobre otros, unos sobre otros. Los que fueron aplastados murieron. La gente de allí los sacó”, dijo un testigo.
Los familiares lloraron de angustia mientras los cuerpos de los muertos, colocados en camillas y cubiertos con sábanas blancas, se alineaban en los terrenos de un hospital local. Un autobús que llegó allí transportaba a más víctimas, cuyos cuerpos yacían en los asientos del interior.
El oficial de policía Rajesh Singh dijo que probablemente había hacinamiento en el evento en una aldea en el distrito de Hathras, a unos 350 kilómetros al suroeste de la capital del estado, Lucknow.
Los informes iniciales dijeron que los organizadores tenían permiso para recibir a unas 5.000 personas, pero más de 15.000 asistieron al evento del predicador hindú, que solía ser oficial de policía en el estado antes de dejar su trabajo para dar sermones religiosos. Ha dirigido otras reuniones similares durante las últimas dos décadas.
El primer ministro indio, Narendra Modi, ofreció sus condolencias a las familias de los muertos y dijo que el gobierno federal estaba trabajando con las autoridades estatales para garantizar que los heridos recibieran ayuda.
El ministro principal de Uttar Pradesh, Yogi Adityanath, calificó la estampida de desgarradora en una publicación en X. Dijo que las autoridades estaban investigando.
