Casi 200 personas murieron y los rescatistas siguen buscando a más de 130 personas desaparecidas en el estado de Kerala, uno de los destinos turísticos más populares.
Las fuertes lluvias que provocaron deslizamientos de tierra que mataron a cientos de personas en el sur de la India el mes pasado se vieron agravadas por el cambio climático provocado por el hombre, según un rápido análisis realizado por científicos del clima.
El estudio de World Weather Attribution, un grupo de científicos que utiliza modelos climáticos establecidos para determinar rápidamente si el cambio climático provocado por el hombre jugó un papel en los fenómenos meteorológicos extremos en todo el mundo, descubrió que los 15 centímetros de lluvia que cayeron en un período de 24 horas del 29 al 30 de julio fueron un 10% más intensos debido al calentamiento global. El grupo espera que más emisiones de gases que calientan el planeta resulten en lluvias intensas cada vez más frecuentes que pueden provocar este tipo de desastres.
Casi 200 personas murieron y los rescatistas siguen buscando a más de 130 personas desaparecidas en el estado de Kerala, uno de los destinos turísticos más populares de la India.
Las precipitaciones del mes pasado que provocaron los deslizamientos de tierra fueron las terceras más intensas en el estado de Kerala desde que la agencia meteorológica de la India comenzó a llevar registros en 1901.
El año pasado, más de 400 personas murieron debido a las fuertes lluvias en el estado de Himachal Pradesh, en el Himalaya indio. Múltiples estudios han descubierto que las lluvias monzónicas de la India se han vuelto más erráticas como resultado del cambio climático.
El estado de Kerala, en el sur de la India, ha sido particularmente vulnerable al clima extremo impulsado por el cambio climático. Las fuertes lluvias de 2018 inundaron grandes partes del estado, matando al menos a 500 personas, y una tormenta ciclónica en 2017 mató al menos a 250 personas, incluidos pescadores que estaban en el mar cerca de las costas del estado.
La India, el país más poblado del mundo, se encuentra entre los mayores emisores actuales de gases que calientan el planeta y también se considera una de las regiones más vulnerables del mundo a los impactos climáticos.
El estudio también recomendó minimizar la deforestación y la explotación de canteras, al tiempo que se mejoran los sistemas de alerta temprana y evacuación para ayudar a proteger a las personas de la región de futuros deslizamientos de tierra e inundaciones. El estudio dijo que la región de Wayanad había visto una disminución del 62% en la cubierta forestal y que eso puede haber contribuido a un mayor riesgo de deslizamientos de tierra durante las fuertes lluvias.
