La sentencia fue recurrida y analizada por un conservador tribunal de apelaciones en Nueva Orleans, que escuchó a los representantes de los estados demandantes, al abogado del gobierno federal y a los defensores de los denominados soñadores sin dar un veredicto
Los dreamers o migrantes que llegaron de niños a Estados Unidos e hicieron su vida en el país pidieron a una corte de apelaciones que mantenga el programa federal DACA que los protege de la deportación, declarado ilegal por un juez.
En septiembre del año pasado un juez de distrito federal de Texas dio la razón a un grupo de estados gobernados por republicanos que cuestionaron la legalidad del programa Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA, en inglés) lanzado por el expresidente demócrata Barack Obama hace 12 años.
La sentencia fue recurrida y analizada por un conservador tribunal de apelaciones en Nueva Orleans, que escuchó a los representantes de los estados demandantes, al abogado del gobierno federal y a los defensores de los denominados soñadores sin dar un veredicto.
Parte de los argumentos de Texas es que el programa ha perjudicado sus arcas debido a los costos educativos y de atención médica en los que incurre atendiendo a los beneficiarios.
Jeremy Feigenbaum, abogado del estado de Nueva York que defiende a los dreamers, adujo que Texas no ha hecho nada para explicar por qué está siendo perjudicado ahora por un beneficiario actual de DACA, que ha sido parte de DACA desde 2012, que vive en Nueva Jersey o en Nueva York.
Desde el lanzamiento de este programa federal se han aprobado más de 800 mil solicitudes y existen unos 580 mil beneficiarios, según cifras oficiales.
La vista judicial tuvo lugar a menos de un mes de las elecciones presidenciales del 5 de noviembre, que disputarán el expresidente republicano Donald Trump, de 78 años, conocido por su retórica antimigrante, y la vicepresidenta demócrata Kamala Harris, de 59 años y partidaria de proteger a los dreamers.
DACA permite a los dreamers vivir y trabajar legalmente en el país que consideran su hogar. Para acogerse al programa deben vivir en Estados Unidos desde 2007 y haber llegado antes de cumplir 16 años, además de estar estudiando, haberse graduado o ser veteranos de las fuerzas armadas y no tener antecedentes.