La alcaldía de Nueva York informó que cerrará 25 albergues para inmigrantes en los próximos dos meses tras constatar una merma en el flujo de personas que han estado llegando a la ciudad desde hace dos años y a las estrategias que se han puesto en marcha, como reducir la estadía en los asilos para solteros y familias.
El alcalde Eric Adams también atribuyó este descenso, registrado durante 22 semanas consecutivas, a las políticas puestas en marcha por la administración del presidente Joe Biden que ha reducido la entrada de inmigrantes en la frontera y a otras iniciativas de la ciudad como pagar el costo de viajes a otros estados y a la gestión de solicitudes de asilo.
La lista incluye el albergue ubicado en el Floyd Bennett, un antiguo aeródromo gestionado por el Servicio de Parques nacional que fue usado como refugio tras ser autorizado por el Gobierno federal.
De acuerdo con el alcalde, el número de inmigrantes en los refugios está en su punto más bajo en más de 17 meses y destacó que como resultado de las estrategias puestas en marcha, más de 170 mil han dejado los albergues.
Hace dos años la ciudad comenzó a recibir cientos de inmigrantes diarios, enviados en un primer momento por el gobernador republicano de Texas, Greg Abbott, y otros que viajaron desde otros estados, lo que abarrotó los albergues públicos.
Eso hizo que la administración Adams alquilara hoteles y otras instalaciones como el aeródromo y levantara carpas para alojar a los inmigrantes, lo que tuvo un costo enorme para las arcas municipales.
Señaló además que a través del Centro de ayuda para solicitudes de asilo se ha ayudado a casi 87 mil inmigrantes con su solicitud de autorización de trabajo, el estatus de protección temporal y el de asilo. También que más del 70 % de los adultos bajo el cuidado de la ciudad tienen o han solicitado autorización para trabajar.
Adams destacó que se han comprado 47 mil billetes para ayudar a los inmigrantes a llegar a otros destinos y que se han realizado más de 700 mil sesiones de gestión de casos con inmigrantes para ayudarles a identificar vías autosuficientes para salir de los refugios.
Por su parte, las oenegés Coalición de Inmigración y Se Hace Camino Nueva York dieron la bienvenida al cierre del Floyd Bennett, pero aseguraron ahora que se necesita que Adams se centre en soluciones humanas que garanticen que los inmigrantes estarán seguros en los próximos cuatro años.