El Papa Francisco hizo un llamado este miércoles, 1 de enero, para la condonación de las deudas de los países más pobres, como parte de su mensaje para la Jornada Mundial de la Paz, coincidiendo con el inicio del Año Nuevo. Durante el rezo del Ángelus desde el Palacio Apostólico, el pontífice destacó la importancia del perdón, señalando que «el primero en perdonar las deudas es Dios». En este contexto, instó a los gobiernos de los países de tradición cristiana a dar un ejemplo al cancelar o reducir las deudas de las naciones más necesitadas.
Francisco recordó que el Papa San Pablo VI había establecido que el primer día del año se convirtiera en la Jornada Mundial de la Paz, con un enfoque particular este año en el Jubileo y la condonación de deudas. Subrayó que esta acción debe tener un impacto social, para evitar que pueblos y familias se vean aplastados por las cargas económicas.
Además, el Papa propuso que una parte del dinero destinado a armamento sea redirigido para crear un fondo para combatir la pobreza y eliminar las condenas a muerte. Reafirmó su llamado a la paz, expresando su agradecimiento a aquellos que trabajan por el diálogo y las negociaciones en las zonas de conflicto. Este mensaje, que subraya la necesidad de restaurar la dignidad de las poblaciones empobrecidas, será parte de las tres acciones que Francisco sugerirá a los mandatarios en sus visitas durante este 2025.