En Budapest miles de personas se manifestaron contra ley que busca prohibir el desfile anual del orgullo en la capital húngara.
Fueron miles de personas se manifestaron en Budapest para protestar contra una ley recientemente adoptada que busca prohibir el desfile anual del orgullo LGTBQ.
Esta ley es la última de una serie de medidas emprendidas por el gobierno del primer ministro Viktor Orbán, que, según sus detractores, socava los derechos del colectivo LGTBQ de Hungría, país miembro de la UE.
Se busca prohibir la marcha del Orgullo alegando que infringe la ley de protección de la infancia. Las autoridades podrán sancionar a quienes asistan u organicen tal evento y utilizar herramientas de reconocimiento facial para identificar a eventuales infractores.
Portando banderas húngaras y arcoíris, y con carteles que rezaban “Basta de mentiras” o “¡Abajo Orbán! Queremos democracia”, más de 10,000 personas se concentraron en el centro de Budapest.
Akos Hadhazy, diputado independiente convocó la manifestación, afirmó que las protestas no pararan hasta que la ley sea derogada y criticó lo que denominó una ley tecnofascista similar a otras aprobadas en China y Rusia.
Para Dorottya Redai, de la organización Labrisz, defensora de los derechos de las lesbianas, afirmó que la ley va más allá de restringir el derecho fundamental de reunión pacífica y que el gobierno quiere borrar claramente a la gente LGTBQ de la vida pública.
Despúes que el Parlamento aprobó el texto a mediados de marzo, los manifestantes bloquearon un puente de la capital durante más de tres horas.
Afirmaron los organizadores de la marcha que prevén seguir adelante con la trigésima edición de marcha del Orgullo en Budapest, prevista el 28 de junio.