Estados Unidos tomó medidas contra la entrada ilegal de xilazina, un potente sedante para animales que se mezcla con fentanilo u otros estupefacientes para formar la llamada “droga zombi” o Tranq, de efectos “potencialmente mortales” y que puede pudrir la piel.
Las autoridades sanitarias anunciaron restricciones a la entrada ilegal de xilazina, autorizada desde 1972 por la Agencia Estadounidense de Medicamentos (FDA) como sedante y analgésico veterinario, por ejemplo para calmar el dolor de los caballos y ciervos.
La xilacina “se ha encontrado cada vez más en drogas ilícitas como el fentanilo (…) y se ha detectado cada vez más en muertes por sobredosis” en el país, sumido en la peor crisis de drogas de su historia, con 107.735 muertos por sobredosis o envenenamiento accidental entre agosto de 2021 y agosto de 2022, afirma la FDA en un comunicado.
Su uso en personas no es seguro “y puede causar efectos secundarios graves y potencialmente mortales” dado que puede “reducir la respiración, la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la temperatura corporal a niveles críticos”, advierte la FDA.
En las calles se conoce como “droga zombi” porque los consumidores parecen zombis.
“Las personas que se inyectan drogas que contienen xilazina pueden desarrollar heridas graves en la piel y parches de tejido muerto y en descomposición que se infectan fácilmente y, si no se tratan, pueden provocar una amputación”, alertan las autoridades sanitarias estadounidenses.
Las heridas pueden desarrollarse incluso en zonas del cuerpo alejadas del lugar donde se inyecta y “convertirse en una amenaza para la vida”.
La FDA “sigue preocupada por el aumento de la prevalencia de xilazina mezclada con drogas ilícitas”, afirma el jefe de la FDA, Robert Califf, citado en un comunicado.
La xilazina se suele mezclar con drogas como el fentanilo, la heroína, las metanfetaminas o la cocaína y los consumidores no siempre son conscientes de su presencia.
Su uso se ha propagado en el noreste de Estados Unidos.
Según un estudio, en 2020 se detectó xilazina en el 26% de las sobredosis mortales en Pensilvania y el 20% en Maryland, un estado aledaño a la capital, Washington.
Pero además la naloxona, un antídoto que puede reanimar a una persona al revertir una sobredosis de opioides, no es eficaz contra los efectos de la xilazina.
Aún así los expertos recomiendan administrar naloxona cuando una persona sufre una sobredosis.
Es un “creciente problema de salud pública”, advierte la FDA.
Las medidas tomadas este martes están destinadas a “garantizar que las importaciones de medicamentos que contienen xilazina en el país estén destinadas al suministro veterinario”, afirma la FDA que vigilará no solo el producto final sino también los ingredientes utilizados para fabricarla.