Donald Trump, expresidente de Estados Unidos y favorito para volver a ser el candidato republicano al cargo en 2024, se declaró este martes no culpable de 34 cargos de delitos graves de falsificación de registros comerciales tras una investigación sobre el pago de dinero por silencio a una estrella porno.
Vestido con un traje azul oscuro y corbata roja, Trump, de 76 años, mostró poca emoción cuando saludó a una multitud reunida fuera de la corte después de ser conducido en una caravana desde su residencia neoyorquina en la Torre Trump.
El republicano, que ha calificado las acusaciones de motivaciones políticas, levantó el puño en un gesto a los periodistas mientras abandonaba la Torre Trump.
El exmandatario no dijo nada mientras caminaba junto a la policía y a través de un pasillo del tribunal antes de entrar en la sala para la comparecencia.
Donald Trump se declaró “no culpable” de los cargos imputados por la justicia de Manhattan por un soborno a una actriz porno, en la primera imputación penal a un expresidente estadounidense que podría tener consecuencias para su aspiración de regresar a la Casa Blanca.
El juez de origen colombiano Juan Merchán, le inculpó de 34 cargos relacionados con falsificación de registros comerciales en el pago de 130,000 dólares a la estrella porno Stormy Daniels en la recta final de la campaña electoral de 2016 para que callara una supuesta relación extramarital ocurrida diez años antes y que él siempre ha negado.
El magnate tendría que someterse a un juicio, que intentará evitar por todos los medios, con consecuencias imprevisibles para su carrera a la presidencia en los comicios de 2024.
Su entonces abogado Michael Cohen fue el encargado de hacer el pago y el magnate le reembolsó la suma fraccionada presuntamente haciéndola pasar como minutas profesionales.
Sentado entre sus abogados, Trump aparecía con un semblante sombrío y preocupado, según una foto tomada dentro de la sala, tras someterse al protocolo habitual: toma de huellas dactilares y fotos para la ficha policial.
Tanto el expresidente como sus abogados han insistido en el despropósito de la causa. Trump no cesa de gritar que es una “caza de brujas”.
La histórica comparecencia judicial del expresidente “no es una prioridad” para su sucesor Joe Biden, aseguró este martes la portavoz de la Casa Blanca.
El expresidente estadounidense salió del edificio tras pasar dos horas en una sala del tribunal-
Cientos de simpatizantes de Trump, en un parque frente al tribunal de Manhattan, vitoreaban y hacían sonar silbatos. Sus detractores sostenían pancartas, incluida una de Trump vestido con un uniforme de cárcel a rayas entre rejas y otra en la que se leía: “Enciérrenlo”.
Cualquier juicio está por lo menos a más de un año de distancia, dijeron expertos legales. Ser acusado o incluso condenado no impide legalmente a Trump presentarse a las elecciones presidenciales.
La Casa Blanca no se pronunció sobre lo que ocurría en Nueva York.
En una publicación en redes sociales, Trump dijo que el Tribunal Penal de Manhattan era un “lugar muy injusto” e instó a que el caso se trasladara al distrito neoyorquino de Staten Island, que suele votar a los republicanos. No estaba claro si sus abogados pedirían al tribunal un cambio de sede.
La ventaja de Trump se ha ampliado sobre sus rivales en la contienda por la nominación presidencial del Partido Republicano, según un sondeo de Reuters/Ipsos publicado el lunes, realizado tras conocerse la noticia de que se enfrentaría a cargos penales.
Alrededor del 48% de los republicanos dicen que quieren que Trump sea el candidato presidencial de su partido, frente al 44% del mes pasado. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, en segundo lugar, cayó del 30% a alrededor del 19 por ciento.
Más de dos tercios de los encuestados dijeron que creían que Trump pagó dinero por silencio a Daniels, pero la mitad dijo que cree que las acusaciones tienen motivaciones políticas.