El cierre es la última de las férreas medidas adoptadas por el régimen de Xi Jinping contra los grupos de defensa.
El espacio para la comunidad LGBTQ de China anunció recientemente que se vio obligada a reducir su espacio debido a la campaña de represión del régimen del presidente Xi Jinping.
Desde su nacimiento en 2008, el Centro LGBT de Beijing había desempeñado un papel importante en la lucha contra los prejuicios hacia las minorías sexuales y de género en China.
“Debido a fuerzas fuera de nuestro control, anunciamos lamentablemente que el Centro LGBT de Beijing dejó de funcionar hoy”, informó el centro el pasado 15 de mayo en un texto publicado en la cuenta oficial del grupo en la plataforma WeChat.
El Centro LGBT de Beijing no respondió a una solicitud de comentarios hecha por correo electrónico. El Ministerio de Asuntos Civiles, que supervisa a las organizaciones sin fines de lucro en China, tampoco respondió de momento a una solicitud de comentarios enviada por fax.
El cierre representa un golpe crítico para los grupos que alguna vez pudieron hacer público su trabajo de defensa por los derechos LGBTQ+.
El Centro LGBT de Beijing había descrito su misión como algo en evolución. Comenzó como un espacio seguro para que la comunidad realizara eventos y luego se convirtió en un grupo de defensa con el objetivo de “mejorar las condiciones de vida de la comunidad sexualmente diversa”. Ofrecían asesoramiento de salud emocional a bajo costo y publicaban listas de profesionales de la salud amigables con la comunidad LGBTQ.
El cierre del centro se debe a los esfuerzos de las autoridades chinas por aumentar la tasa de natalidad para abordar las preocupaciones demográficas. El régimen informó su primera disminución de población en décadas y está siendo superada por India como el país más poblado del mundo.
Aunque la homosexualidad es legal en China, no se permite el matrimonio ni la adopción entre personas del mismo sexo, y las personas LGBTQ no tienen protección legal contra la discriminación.
Bajo el régimen de Xi Jinping, las personas LGBTQ en China han experimentado una disminución de espacios seguros y una represión contra los grupos de defensa.
Varios centros y grupos LGBTQ prominentes han cerrado, y se ha incrementado la censura gubernamental, incluyendo la prohibición de representaciones de hombres “afeminados” en la televisión y la eliminación de tramas LGBTQ de programas populares. Los cambios en China reflejan una tendencia preocupante para la comunidad LGBTQ en el país.
En China, las normas culturales conservadoras dificultan que las personas LGBTQ+ compartan su identidad debido al temor a la falta de aceptación. Aunque el país está mostrando una mayor apertura hacia la comunidad LGBTQ+, las normas sociales tradicionales homofóbicas siguen siendo un obstáculo, especialmente en las instituciones estatales.
