El Ejército de Sudán y el grupo paramilitar Fuerzas de Apoyo Rápido aceptaron este sábado una nueva tregua de 72 horas que entrará en vigor el domingo, así lo anunciaron los mediadores sauditas y estadounidenses, en medio de una intensificación de los combates en Jartum.
“El reino de Arabia Saudita y Estados Unidos anuncian el acuerdo de los representantes de las Fuerzas Armadas sudanesas y de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) para un cese el fuego en Sudán por un período de 72 horas a partir del domingo”, indicó el Ministerio saudita de Relaciones Exteriores en un comunicado.
El alto al fuego entrará en vigor a las 06H00, hora local, añadió la misma fuente. Las treguas anteriores fueron casi siempre violadas por ambas partes.
El anuncio del alto al fuego se produce tras una intensificación de los enfrentamientos en la capital Jartum, donde murieron 17 civiles, incluidos cinco niños, informó una ONG.
Los encarnizados choques también aceleraron el éxodo en la región de Darfur (oeste), una de las zonas más afectadas por el conflicto, donde médicos reportaron que cientos de heridos se trasladaron al vecino Chad para recibir atención.
Los combates, que empezaron en abril, oponen al jefe de ejército, el general Fatah al Burhan, a los paramilitares de las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) comandadas por el general Mohamed Hamdan Daglo.
Desde entonces, ambos jefes militares han acordado numerosas treguas que han resultado fallidas.
Al anunciar la nueva tregua, los mediadores dijeron que “las dos partes acordaron que durante el período de alto el fuego se abstendrían de realizar desplazamientos y ataques, utilizar aviones de guerra o drones (y) reabastecer sus fuerzas”.
Las FAR, que acusan al ejército de concentrar sus bombardeos en zonas residenciales, aseguraron que derribaron un avión caza del ejército.
Varios barrios de Jartum se hallan privados de agua potable y la red eléctrica funciona solo unas horas por semana.
La situación es igualmente preocupante en Darfur, “presa de la violencia”, alertó la ONG Médicos Sin Fronteras (MSF).
Los testimonios de ataques masivos contra civiles se multiplican en esa región, de donde unos 149.000 huyeron hacia Chad desde el inicio de los combates el 15 de abril, según datos de la ONU.
Unas 2.000 personas han muerto en Sudán a causa del conflicto, de acuerdo con la organización Acled. La ONU evalúa en 2,2 millones el número de desplazados en todo el país.
Unos 25 millones de los 45 millones de habitantes de Sudán sobreviven actualmente gracias a la asistencia humanitaria.