Esta semana un escándalo ha sacudido a la Federación Camerunesa de Fútbol (FCF) y más específicamente a su presidente, Samuel Eto’o, después de que se publicara una conversación que mantuvo a principios de año con el máximo dirigente del club de Victoria United, club que por entonces jugaba en la segunda categoría y que hace algunas semanas consiguió el ascenso a la máxima división. En la charla se puede observar cómo el ex goleador del Barcelona e Inter de Milan le promete al directivo que su equipo subiría a primera.
Los textuales fueron publicados por el portal Camfoot y en apenas horas se ha desatado un terremoto en el fútbol de ese país. Para entender el contexto, el diálogo tuvo lugar entre el 2 y 3 de enero y uno de los protagonistas Valentine Gwain, presidente del Victoria United, quien el 30 de diciembre había interrumpido un partido que su equipo perdía 1-0 al invadir el terreno de juego a los 86 minutos enfadado por el desempeño del referee.
La charla inicia cuando Gwain llama a Eto’o, presidente de la federación, para manifestar su frustración porque su equipo, que luchaba por ascender, había sido perjudicado por la labor del juez. Ante esto, recibe la respuesta inmediata del ex goleador camerunés: “Hay cosas que podemos hacer, pero tienes que ser muy discreto hermano”.
Y ante la insistencia, explica que en ese momento se encontraba yendo hacia su hogar, después de haber celebrado Año Nuevo, por lo que pronto se pondría a trabajar al respecto: “Ni siquiera he tenido tiempo de llegar a casa todavía. Estoy fuera, hermano. Ni siquiera he tenido tiempo de ir a casa y trabajar con el presidente (de la asociación de árbitros) porque no puedo llamar a los árbitros directamente y decirles que tengan cuidado. Pero puedo trabajar con el presidente”.
En varias ocasiones, Eto’o recuerda una conversación que ambos tuvieron en Qatar durante el Mundial, aunque no hace referencia al contenido de la misma. El portal asegura que se trata de una charla en la que le prometió el ascenso de su equipo, el Victoria United, ya que Gwain lo había apoyado en su proyecto hacia la presidencia.
Durante el diálogo, el ex futbolista siempre se muestra insistente con que la reunión la mantengan alejada del foco de la prensa y del público: “Es mejor que nos veamos discretamente. Incluso organizas dos días, invitas a tus mujeres a Yaundé, nos vemos discretamente, hablamos y te vas”. Además, explica que la clave es tener buena relación con el presidente de la liga: “Él tiene el poder… Y de ahí, él con sus comisiones, ya va a poder suspender hasta al presidente de los árbitros”.
Justamente, Gwain se manifiesta molesto con Fokoule, líder del arbitraje, a quien acusa de haber colocado un referee para perjudicarlo en el último partido: “Es algo planeado para destruirme”.
Ante ese comentario, Eto’o es contundente en su respuesta: “No, no, no, no. Nuestro club, el Opopo (apodo con el que se conoce al Victoria United), debe subir a primera división. Ese es nuestro objetivo”. Luego, promete que se reunirá con el responsable del arbitraje y el presidente de la liga para charlar al respecto: “Nos vamos a encontrar los tres, y vamos a hablar discretamente y vamos a arreglar todo eso”.