El Gobierno de El Salvador detalló la operación que emprendió contra una estructura internacional, con integrantes con nacionalidad colombiana, que estaría ligada con los llamados créditos extorsivos ‘gota a gota’.
Hasta el momento, han sido detenidas 110 personas que estaban vinculadas a esta organización criminal transnacional que se vale principalmente de estafas, lavado de dinero y coacción.
En un trino, el mandatario salvadoreño, Nayib Bukele, escribió que si bien considera a los colombianos como “hermanos”, “en toda sociedad, siempre existe un pequeño porcentaje que quiere aprovecharse de los demás”.
En una rueda conjunta entre el fiscal general de El Salvador, Rodolfo Delgado, y el ministro de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, se informó sobre una compleja estructura organización criminal transnacional que lleva a cabo estafas, lavado de dinero, coacción y estafas informáticas.
Según explicó el titular del ente acusador, estas personas ofrecían créditos con 20 % de interés y “posteriormente realizaban rutas de cobros a las personas que caían en sus engaños”.
Los desembolsos eran solicitados “a través de amenazas y ultrajes” y “cuando una víctima no podía pagar el préstamo, usurpaban su identidad, obtenían sus cuentas bancarias y trasladaban el dinero al extranjero”, detalló.
La Fiscalía informó que ha recibido 3.000 denuncias, principalmente por estafas y estafas informáticas, que han sido presuntamente cometidas por las personas de nacionalidad colombiana que pertenecen a esas redes criminales.
Según los datos que se manejan, desde 2021 hasta ahora se han hecho remesas hacia Colombia por una cifra superior a los 20 millones de dólares.
La Fiscalía informó que ha recibido 3.000 denuncias, principalmente por estafas y estafas informáticas, que han sido presuntamente cometidas por las personas de nacionalidad colombiana que pertenecen a esas redes criminales.
Este tipo de préstamos extorsivos son una modalidad que existe en en el país suramericano para quienes no pueden acceder a un financiamiento bancario.
La trampa de esos créditos es que los deudores terminan pagando intereses mensuales que van desde el 10 al 30 %, lo que está tipificado como delito en el Código Penal. El impago puede generar desde amenazas, hasta explotación, extorsión y asesinatos.