La orden es el primer ejemplo conocido de fiscales que buscan directamente las comunicaciones del expresidente en la investigación sobre los hechos del 6 de enero de 2021.
La fiscalía de Jack Smith, el fiscal especial que en dos ocasiones ha fincado acusaciones en contra del ex presidente Donald J. Trump, obtuvo una orden de cateo a principios de este año para la cuenta de Twitter de Trump que no ha sido utilizada en un largo tiempo, como parte de su investigación sobre el intento que hizo para anular la elección del 2020, de acuerdo a documentos de la corte que fueron dados a conocer este miércoles.
La orden, que fue firmada por un juez federal en Washington en el mes de enero después que Elon Musk adquirió Twitter, que ahora se llama X, es el primer ejemplo conocido de la fiscalía que buscó directamente en las comunicaciones de Trump y eso le agrega una nueva dimensión al alcance de los esfuerzos del fiscal especial para investigar al ex presidente.
Los documentos de la corte, que surgieron de una apelación de Twitter que desafió parte de la decisión del juez al emitir la orden de cateo, no revela qué buscaba la fiscalía en la cuenta de Twitter de Trump, que la empresa tecnológica cerró durante casi dos años inmediatamente después del ataque al Capitolio el 6 de enero del 2021.
Aunque los documentos indican que la fiscalía recibió el permiso del juez sin decirle a Trump durante meses que habían obtenido la orden de cateo a su cuenta.
La fiscalía temía que Trump se enterara de la orden de cateo y “pudiera poner gravemente en peligro la investigación”, dándole la oportunidad de “destruir la evidencia, cambiar el patrón de comportamiento o notificarles a los confederados”, dicen los documentos.
Rápidamente, Trump respondió a la noticia acerca de la orden de cateo en su red social, Verdad Social.
“Acabo de enterarme que el deshonesto Departamento de Justicia de Joe Biden atacó en secreto mi cuenta de Twitter, sin darme a conocer este importante golpe a “mis derechos civiles”.
“Mi contrincante político se ha vuelto loco tratando de afectar mi campaña para presidente”.
En el caótico período entre la elección y el 6 de enero, la cuenta de Twitter de Trump fue una de las más prominente plataformas del país en las redes sociales, con millones de seguidores.
El que la fiscalía haya solicitado una orden de cateo a la cuenta sugiere que querían información específica de la empresa o estaban interesados en algunos aspectos no públicos de la cuenta — aunque no se sabe con precisión qué pudo haber sido..
