Un grupo de manifestantes ha irrumpido en el edificio del Ministerio de Asuntos Exteriores en Trípoli para denunciar una reunión en Roma (Italia) entre la ministra libia, Najla Mangoush, y su homólogo israelí, Eli Cohen.
La noticia de la reunión de normalización provocó una ola de ira entre los libios en las redes sociales, que condenaron lo que perciben como un acto de “traición” cometido por todos los implicados, según recoge el canal de televisión Al Mayadeen.
En la ciudad oriental de Tajoura, los manifestantes cortaron una calle principal y amenazaron con intensificar sus acciones, incluido el bloqueo del acceso ferroviario a la sede del Gobierno del primer ministro Abdul Hamid Dbeibé.
Por su parte, el Ministerio de Asuntos Exteriores libio afirmó que la ministra Mangoush se negó a mantener reuniones con ninguna parte que representara a la entidad israelí, y que se mantiene firme en esa postura.
Asimismo, explicó que lo ocurrido en Roma fue un encuentro casual informal y no planificado durante una reunión con el ministro de Asuntos Exteriores italiano, y añadió que renueva su rechazo total y absoluto a la normalización de las relaciones con Israel y confirma una vez más su firme postura respecto a la causa palestina.
Sin embargo, posteriormente el Gobierno libio decidió suspender a Mangoush por la reunión con su homólogo israelí.
Por otra parte, los medios israelíes reportaron que el ministro Cohen se reunió con su homóloga libia en lo que sería el primer encuentro oficial entre los diplomáticos de más alto rango de ambos países.
Los dos se habrían reunido para discutir la posibilidad de cooperación y la preservación de los sitios del patrimonio judío en Libia. Además, en la reunión se habló de la ayuda humanitaria israelí y de la ayuda a la agricultura, la gestión del agua y otras cuestiones, según el Ministerio.
Cohen calificó la reunión de “histórica” y de “primer paso” en la creación de lazos entre ambos países.