La Casa Blanca identificó este lunes a México entre el grupo de principales países de tránsito o productores de drogas ilícitas.
En el listado se encuentran, además: Afganistán, Bahamas, Belice, Bolivia, Birmania, República Popular China (RPC), Colombia, Costa Rica, República Dominicana, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, India, Jamaica, Laos, Nicaragua, Pakistán, Panamá, Perú y Venezuela.
En una declaración del presidente Joe Biden, se explica que la lista anterior, “no es necesariamente un reflejo de los (pocos o muchos) esfuerzos de los gobiernos de estos países contra las drogas o del nivel de cooperación con los Estados Unidos”.
La razón para colocarlos en este listado es la combinación de factores geográficos, comerciales y económicos que permiten el tránsito o la producción de drogas, incluso si un gobierno ha participado en medidas sólidas y diligentes de control de estupefacientes y de aplicación de la ley.
Recientemente se modificó la definición de los principales países fuente de drogas para incluir a los países fuente de precursores químicos utilizados para producir drogas ilícitas que afectan significativamente a los Estados Unidos.
Para los países con grandes industrias químicas y farmacéuticas, evitar que los precursores químicos se desvíen a la producción de drogas ilícitas es un desafío particularmente difícil, incluso para los Estados Unidos y otros países con estrictos regímenes regulatorios para evitar el desvío”, subraya.
En este orden, China ha sido identificado como un importante país de origen debido a este cambio en la legislación, por lo que Estados Unidos insta gobierno asiático y a otros países con precursores a que endurezcan las cadenas de suministro de productos químicos y eviten el desvío.
En el caso de México, el gobierno de Biden destaca el compromiso por enfrentar la amenaza que representa para la población la comercialización de drogas ilícitas.
Bajo el Marco del Bicentenario para la Seguridad, la Salud Pública y las Comunidades Seguras, nuestros dos países han cooperado para confiscar mayores volúmenes de fentanilo y otras drogas. Hemos trabajado con éxito durante el último año para mejorar la colaboración de las fuerzas del orden, prevenir el desvío de precursores químicos y detener a figuras clave del crimen organizado involucradas en el tráfico de drogas y armas de fuego, el tráfico ilícito de migrantes y otras actividades delictivas.
“Lamentablemente, algunos de estos arrestos resultaron en la pérdida de vidas de funcionarios mexicanos, y sus sacrificios subrayan el compromiso compartido de ambos países de hacer lo que sea necesario para luchar contra estas organizaciones criminales”, destaca la comunicación.
En este orden se manifiesta el compromiso por fortalecer el intercambio de información, la capacidad para detectar y contrarrestar la producción y el tráfico de drogas, así como la desactivación de productos químicos y equipos relacionados con las drogas; y mejorar los mecanismos para monitorear, prevenir y tratar los trastornos por uso de sustancias de drogas.
La declaración refiere que, aunque la tasa de muertes por sobredosis de drogas en los Estados Unidos se está aplanando después de años de fuertes aumentos, se perdieron más de 109 mil vidas por sobredosis de drogas en 2022, según datos preliminares de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
En cuanto a recursos, agregó que a nivel nacional, solo en el último año fiscal, se asignaron más de 24 mil millones de dólares para ampliar la prevención y el tratamiento basados en la evidencia, incluidos los servicios de apoyo a la reducción de daños y la recuperación, con inversiones específicas para satisfacer las necesidades de las poblaciones con mayor riesgo de sobredosis y trastorno por consumo de sustancias.
Más allá de estos recursos adicionales, mi Administración amplió el acceso a la naloxona, que puede revertir las sobredosis relacionadas con los opioides, e hizo que este medicamento que salva vidas estuviera disponible de venta libre. Mi administración también ha eliminado las barreras al tratamiento, incluso trabajando con el Congreso en la legislación bipartidista”.
Biden anticipa que el presupuesto para el año fiscal 2024 requiere una inversión histórica aún mayor de 46 mil 100 millones de dólares para las agencias del Programa Nacional de Control de Drogas, un aumento de más de 2 mil millones con respecto a lo que se promulgó durante el año anterior.
Acusa que la gran mayoría de las drogas ilícitas que causan el mayor daño en los Estados Unidos se originan más allá de sus fronteras, por lo que el medio más eficaz de reducir la disponibilidad de estas drogas es ampliar y mejorar la cooperación con sus socios internacionales.