La República Dominicana anunció nuevas medidas para fortalecer el control en su frontera con Haití, incluida una extensión indefinida del cierre fronterizo que promulgó el mes pasado, además de un aumento de las fuerzas militares y una nueva prohibición de exportaciones.
Al sellar República Dominicana su frontera citó que la construcción de una canal desde el río Masacre violaba un tratado entre los dos países.
El gobierno de Haití respondió diciendo que respaldaba los derechos de sus ciudadanos al uso equitativo de las aguas compartidas y seguía favoreciendo el diálogo.
La semana pasada, el presidente dominicano Luis Abinader, que busca la reelección el próximo año, dijo que un canal desmantelado en el lado dominicano estaba listo para reiniciarse y que continuaba la planificación para la construcción de dos represas en el río compartido.
Según las nuevas medidas, se prohibirán las exportaciones de productos electrónicos, cemento y otros materiales de construcción para evitar la construcción de estructuras que amenacen el río o los recursos relacionados.
El gobierno dijo que también lanzaría “corredores comerciales provisionales” en las provincias fronterizas para facilitar el comercio, bajo estrictos controles militares, de productos dominicanos como alimentos y medicinas.
Santo Domingo dijo que también extendería indefinidamente la suspensión de la emisión de visas a ciudadanos haitianos y crearía un fondo para financiar un programa agrícola para reducir la contratación de trabajadores inmigrantes indocumentados.
Las nuevas medidas entrarán en vigor el miércoles. República Dominicana ha deportado a decenas de miles de inmigrantes haitianos que han huido de la escalada de la guerra entre pandillas en su propio país, lo que ha generado críticas internacionales.