La Comisión Europea (CE) advirtió este jueves a la red social china TikTok de contener propaganda terrorista tras el ataque de Hamás a Israel el pasado sábado y le pidió que adopte medidas para eliminarla, teniendo en cuenta que es una plataforma que utilizan mucho los menores de edad.
El comisario europeo de Mercado Interior, Thierry Breton, responsable de controlar a las empresas digitales en la UE, escribió hoy una carta al consejero delegado de TikTok, Shou Zi Chew, pidiéndole que le explique en 24 horas qué medidas adoptará, igual que ha reclamado a la red social X y a Meta, matriz de Instagram y Facebook.
“Dado que muchos usuarios, particularmente menores, recurren a su plataforma como una fuente de noticias, las fuentes fiables deben diferenciarse adecuadamente de la propaganda terrorista”, dijo Breton.
Señaló la especial obligación que a su entender tiene Shou Zi Chew de proteger a los niños y a los adolescentes del contenido violento que representa la toma de rehenes y de otros vídeos gráficos que según se informa, circulan en su plataforma, dijo en referencia a los ciudadanos israelíes que ha capturado Hamás, a los que amenaza con matar si Israel sigue bombardeando Gaza.
Breton envió el martes una carta similar al propietario de X, Elon Musk, y ha sido el propio comisario quien hoy confirmó en esa misma red social que Bruselas ya ha recibido la respuesta de la compañía y la está analizando.
También la víspera mandó otra misiva al consejero delegado de Meta, Mark Zuckerberg, advirtiéndole de que en esta red social estaban diseminando noticias falsas tras el ataque de Hamás, aunque evitó tildar explícitamente ese contenido de terrorista.
El comisario les ha pedido a todos ellos que adopten medidas en base a la ley de servicios digitales, que obliga a las plataformas a eliminar rápidamente el contenido ilegal en internet.
La ley permite a la Comisión abrir una investigación contra las empresas si tiene dudas de que están incumpliendo la normativa y, si no eliminan el contenido ilegal de forma voluntaria, podría aplicar medidas cautelares.
Unas medidas que no irían más allá de lo necesario para prevenir daños graves y que estarían limitadas en el tiempo, aunque se podrían renovar si fuera necesario y apropiado, según explicó hoy un portavoz del Ejecutivo comunitario.
Si al término de la investigación, siguen incumpliendo la normativa europea, Bruselas podría imponerles una multa de hasta el 6 % de su facturación anual mundial y, como medida de último recurso, podría pedir a las autoridades judiciales que prohíban a las plataforma en la UE.