Un impactante informe de la oficina del Defensor del Pueblo revela que más de 445,000 personas en España podrían haber sido víctimas de abusos en el ámbito religioso, con casi 236,000 de ellos directamente a manos de sacerdotes. El documento arroja luz sobre esta preocupante situación y también llama a la acción para reparar a las víctimas que han sido abandonadas durante mucho tiempo.
El informe recopila los testimonios de 487 víctimas y fue presentado en el Congreso español por el socialista Ángel Gabilondo, quien lidera la oficina encargada de velar por los derechos de los ciudadanos en España, conocida como Defensor del Pueblo. Este extenso reporte de 777 páginas también incluye los resultados de una encuesta que muestra datos inquietantes sobre la magnitud de los abusos.
La encuesta, realizada a 8,013 personas mayores de edad, revela que un 1.13% de los españoles ha sufrido abusos en el ámbito religioso, y un 0.6% de estos abusos fueron perpetrados por sacerdotes o religiosos. El informe no cuantifica el número total de víctimas, muestra que un 11.7% de los españoles ha sufrido abusos sexuales antes de cumplir los 18 años.
El Defensor del Pueblo critica fuertemente la respuesta de la Iglesia y lamenta que durante mucho tiempo estuvo caracterizada por la negación y la minimización del problema. Algunas víctimas se vieron sometidas a negación, ocultamiento y, en algunos casos, a presiones y culpabilización por parte de representantes de la Iglesia.
Ángel Gabilondo, calificó la respuesta de la Iglesia como insuficiente y dilatoria; criticó prácticas comunes como el traslado de personas abusadoras a otras parroquias, instituciones educativas o incluso a otros países.
No soló se señaló a la iglesia, también a las autoridades públicas que carecieron de procedimientos para prevenir, detectar y responder a los abusos sexuales de menores en los centros escolares de la Iglesia
La recomendación de crear un fondo estatal de reparación para las víctimas, Gabilondo lo considera “imprescindible” y aboga por la participación activa de la Iglesia en este fondo.
El informe no solo da voz a las víctimas, sino que también hace un llamado a la creación de un fondo estatal de compensación para ellas. Además, denuncia la negación y minimización del problema por parte de la jerarquía católica durante un largo período.
Según el informe, el 84% de las víctimas entrevistadas fueron hombres, al igual que la gran mayoría de sus agresores. Sorprendentemente, solo un pequeño porcentaje de los acusados ha enfrentado juicios por parte de las autoridades civiles, y la mayoría de ellos continuaron en sus cargos, fueron trasladados o enfrentaron juicios bajo el derecho canónico.
El presidente del Gobierno español en funciones, Pedro Sánchez, elogió la valentía de las víctimas que colaboraron en la creación de este informe y se comprometió a seguir haciendo todo lo posible para resarcir su sufrimiento.