El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que el Gobierno de la Cuarta Transformación cumple con la responsabilidad de garantizar vacunas contra COVID-19 e influenza estacional a todo el pueblo de México.
Indicó que la población es libre de comprar vacunas contra COVID-19 luego de su autorización, no obstante, el sector salud ofrece las dosis con la misma calidad y de manera gratuita.
“No podemos impedir que se introduzcan vacunas para el COVID o para la influenza o para cualquier otra enfermedad, el que quiera comprar estos medicamentos en las farmacias que lo pueda hacer, sólo que ahora el Estado garantiza estas vacunas y el que quiera comprarlas, las puede comprar, está en libertad”, afirmó.
En ese sentido descartó que el gobierno federal regule los precios de las vacunas, ya que la federación las brinda sin costo.
El subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Ruy López Ridaura, informó que se contabilizan 3.8 millones de dosis aplicadas contra COVID-19 desde el inicio de la campaña en octubre pasado. Esta cifra representa 18 por ciento de la meta contemplada, por lo que llamó a la población a acudir por la vacuna, disponible y gratuita en todo el país.
Puntualizó que desde la semana 40 a la 50 hay un descenso continuo en la curva epidémica de COVID-19; la positividad está entre 3 y 5 por ciento con un comportamiento estable.
En tanto, la campaña contra influenza tiene un avance del 53 por ciento de la población objetivo, es decir, 35 millones de personas al administrarse 19 millones de vacunas hasta el momento.
En influenza se reporta ascenso de casos desde la semana 45, por lo que la positividad está cerca del 20 por ciento.
La vacuna Patria, dijo el funcionario, está en los últimos detalles hacia una autorización definitiva por parte de Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) para la fabricación y producción final.
López Ridaura mencionó que la nueva variante COVID-19 llamada JN.1 o ‘Pirola’ no representa un cuadro clínico más grave de las anteriores.
Debido a la constante vigilancia de autoridades federales y locales, fue detectado en la Ciudad de México un caso de JN.1, subvariante de ómicron.