El presidente Vladimir Putin prometió en vísperas de la Navidad ortodoxa respaldar a los soldados que con las armas en la mano defienden los intereses de Rusia, ordenó a su gobierno un mayor apoyo a quienes luchan y llamó a su pueblo a ser misericordioso y justo.
“Muchos de nuestros hombres, nuestros valientes y heroicos guerreros rusos, incluso ahora, en este día festivo, defienden los intereses de nuestro país con las armas en la mano”, dijo Putin en una reunión con familias de soldados rusos que murieron en Ucrania.
Rusia lanzó su invasión a gran escala de Ucrania en febrero de 2022, en lo que Kiev y sus aliados occidentales dijeron que fue una apropiación de tierras imperialista no provocada.
Casi dos años después, la guerra, que ha matado a miles y desplazado a millones, se ha convertido en un aumento de los ataques aéreos en los territorios de cada uno mientras ambas partes han luchado por lograr avances significativos a lo largo de la línea del frente.
Imágenes de la televisión estatal mostraron al líder ruso asistiendo con un pequeño grupo de familias de soldados asesinados a un servicio íntimo de medianoche, conocido como la Divina Liturgia, más tarde el sábado en una capilla de su residencia en Novo-Ogaryovo, en las afueras de Moscú.
Este año Putin no pidió un alto el fuego en Ucrania para que coincidiera con la festividad que muchos cristianos ortodoxos celebran el 6 y 7 de enero, como ocurrió hace un año.
Putin, que se enfrenta a elecciones en marzo y ha ido suavizando sus discursos para centrarse en los valores tradicionales y la unidad, ordenó a todo su gobierno un mayor apoyo a las familias de los militares asesinados.
“Me gustaría que nuestra reunión fuera una señal clara y comprensible para todos mis colegas en toda la Federación de Rusia y en todos los niveles; una señal clara para garantizar que mis colegas estén siempre y en todas partes con ustedes, repito, en cualquier nivel de poder. “, les dijo a las familias.
En un saludo separado publicado en el sitio web del Kremlin, Putin llamó a los rusos a seguir los valores inquebrantables de bondad, misericordia y justicia y a la Iglesia Ortodoxa Rusa a ayudar a fortalecer la institución de las familias y el patriotismo.
Putin ha utilizado a la Iglesia Ortodoxa como un poderoso aliado para promover su visión de un mundo ruso basado en valores conservadores tradicionales, en contraste con lo que describe como un Occidente decadente. Como reflejo de esa tendencia, Rusia prohibió el año pasado lo que llamó el movimiento social LGBT internacional por motivos de extremismo.
También se celebraron servicios navideños en las zonas de Ucrania controladas por Rusia, a diferencia del resto de Ucrania, donde el presidente Volodymyr Zelenski firmó una ley en julio pasado para cambiar la fecha de las vacaciones de Navidad del 7 de enero al 25 de diciembre como parte de una campaña para “renunciar a la herencia rusa”.