Las protestas cerraron las principales ciudades de Haití el lunes cuando los manifestantes se enfrentaron con la policía y exigieron la renuncia del Primer Ministro Ariel Henry.
Bancos, escuelas y agencias gubernamentales cerraron en las regiones norte y sur de Haití mientras los manifestantes bloquearon las principales rutas con neumáticos en llamas y paralizaron el transporte público, según informes de los medios locales.
En Hinche, una ciudad en la región central de Haití, los manifestantes celebraron la llegada de agentes ambientales estatales fuertemente armados y su comandante, Joseph Jean Baptiste, quienes exigieron la renuncia de Henry.
“Quiero que Ariel se pare frente a mis balas, para que lo atraviesen”, dijo el comandante mientras alguien lo filmaba mientras la multitud vitoreaba.
Los agentes, que pertenecen a la Brigada de Seguridad para Áreas Protegidas, han sido objeto de escrutinio por parte del gobierno tras los recientes enfrentamientos con la policía en el norte de Haití.
Manifestaciones más pequeñas tuvieron lugar en la capital, Puerto Príncipe, donde decenas de manifestantes se reunieron frente a la oficina de Henry antes de que la policía disparara gases lacrimógenos, dispersando a la multitud. Entre los manifestantes se encontraba el candidato presidencial y exprimer ministro Claude Joseph, a quien se ve en un vídeo secándose la cara mientras sus seguidores gritaban: “¡No vamos a parar!”.
Se esperan al menos tres días de protestas que culminarán el miércoles en todo Haití, y se considera que el 7 de febrero es la supuesta fecha límite para que Henry renuncie.
La fecha es significativa en Haití: el 7 de febrero de 1986 marcó el día en que el exdictador Jean-Claude Duvalier huyó a Francia, y el 7 de febrero de 1991 marcó el día en que Jean-Bertrand Aristide, el primer presidente elegido democráticamente de Haití, prestó juramento.