Con 76 votos a favor, el pleno del Senado de la República aprobó una reforma a la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos (CPEUM) para prohibir los matrimonios infantiles en las comunidades indígenas, la cual pasará a la Cámara de Diputados para su ratificación.
Durante la sesión del martes 13 de febrero, los integrantes de la Cámara Alta votaron a favor de la modificación al artículo 2° de la Carta Magna con el fin de que las prácticas de usos y costumbres comunitarias no vulneren los derechos de las infancias y adolescencias.
“Para que las prácticas de usos y costumbres comunitarias no vulneren los derechos de niñas, niños y adolescentes, como lo puede hacer el matrimonio forzado, se aprueba en lo general el dictamen de reforma constitucional”, hizo público el Senado.
El senador del Partido de Revolución Democrática (PRD), Miguel Ángel Mancera Espinoza, fue el único que propuso una reserva a la reforma en materia de protección al interés superior de la niñez en la Constitución, misma que fue aprobada por unanimidad.
En un hecho que pocas veces se ha dado en la LXIV y LXV legislatura, por unanimidad todos los grupos parlamentarios aprobaron los cambios, por lo que se espera que la Cámara Baja también secunde la reforma para que, posteriormente, sean los Congresos locales quienes den el último paso para que sea federal el cambio a las reglas.
Una vez que esto ocurra, la modificación al artículo segundo deberá de ser publicada en el Diario Oficial de la Federación (DOF).
Durante el debate, la legisladora del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Margarita Valdez, indicó que se trata de una lucha histórica, especialmente para la izquierda, y pidió al resto de sus compañeros en el pleno dejar la “politiquería” a un lado para apostar por el bien de la niñez mexicana.
“Siempre hemos luchado por los derechos de los niños y las niñas, no es una lucha de ocasión, ha sido una lucha histórica de las mujeres de izquierda porque las niñas sean bien tratadas (…) no creo que haya una sola persona que por ‘politiquería’ se oponga a esta iniciativa”, puntualizó.
Por otra parte, la integrante de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota, lamentó las costumbres que se han permeado a lo largo de décadas y siglos que afectan a las niñas y mujeres, por lo que destacó que se trata de un delito que tiene que ser penado.
“Con valentía y determinación, las mujeres han salido al frente para que esta práctica que es un delito, es un crimen, llegue a su fin”
Fue en octubre del año pasado que las comisiones del Senado aprobaron la reforma para que pasara al pleno. En aquella ocasión, se apostó porque los cambios aplican para todo el territorio nacional, las zonas que más le interesan a los legisladores son las comunidades rurales, las afrodescendientes y las indígenas donde cambiar a las mujeres por dinero, productos o terrenos aún es considerado normal.
Conviene recordar que en junio del 2018 ya se había aprobado una iniciativa donde los menores de 18 años no podían contraer nupcias ni entre personas por debajo de esa edad y mucho menos entre un niño y un adulto aunque los padres estuvieran de acuerdo o alegaran “usos y costumbres”.