El gobierno de Letonia ha extendido las restricciones a la entrada de ciudadanos rusos al país báltico hasta el próximo año, citando la invasión a gran escala de Ucrania por parte de Moscú que, según los funcionarios, “todavía representa una amenaza para la seguridad interna de Letonia”.
El Gabinete de la primera ministra Evika Siliņa decidió el martes prolongar las condiciones de entrada para los ciudadanos rusos hasta el 4 de marzo de 2025.
A los ciudadanos rusos se les seguirá prohibiendo la entrada a Letonia, un país de la Unión Europea, con fines de turismo y ocio, dijo el gobierno en un comunicado.
Sin embargo, se permitirá la entrada a algunos rusos, incluidos aquellos con permisos de residencia válidos en Letonia u otro estado miembro de la UE, o rusos cuya entrada esté relacionada con consideraciones humanitarias, como los disidentes políticos.
En septiembre de 2022, Polonia y los Estados bálticos (Estonia, Letonia y Lituania) llegaron a un acuerdo conjunto para restringir el número de ciudadanos rusos que vienen a sus países para evitar supuestos riesgos de seguridad en medio de la guerra de Rusia en la cercana Ucrania.
Letonia, miembro de la OTAN, un país de 1,9 millones de habitantes que limita con Rusia, es el hogar de una importante minoría étnica rusa que representa alrededor del 25% de la población del país. La nación del Mar Báltico ha sido anteriormente un popular lugar de vacaciones y su capital, Riga, un popular destino de fin de semana para los turistas rusos.