El líder norcoreano, Kim Jong-un, supervisó un simulacro con fuego real de lanzadores múltiples de cohetes supergrandes con capacidad nuclear, diseñados para apuntar a la capital de Corea del Sur, mientras prometía aumentar su disuasión bélica frente a confrontaciones cada vez más profundas con sus rivales, dijeron medios estatales. Martes.
El informe se produjo un día después de que los ejércitos de Corea del Sur y Japón dijeran que detectaron que Corea del Norte disparaba múltiples misiles balísticos de corto alcance hacia aguas frente a su costa oriental, lo que se suma a una serie de exhibiciones de armas que han aumentado las tensiones regionales.
Los expertos dicen que los cohetes de artillería de gran tamaño de Corea del Norte desdibujan los límites entre los sistemas de artillería y los misiles balísticos porque pueden crear su propio empuje y son guiados durante su lanzamiento. Corea del Norte ha descrito algunos de estos sistemas, incluidos los lanzacohetes múltiples de 600 mm que se probaron el lunes, como capaces de transportar ojivas nucleares tácticas.
Las fotos publicadas mostraban al menos seis cohetes disparados simultáneamente desde vehículos de lanzamiento y llamas y humo cubriendo lo que parecía ser un pequeño objetivo insular.
Las tropas norcoreanas después de los lanzamientos de salvas también llevaron a cabo una prueba separada que simuló una explosión en el aire de un proyectil de artillería a una altitud preestablecida. El informe no especifica si esa prueba fue para ensayar cómo se detonaría un arma nuclear sobre un objetivo enemigo.
Kim Jong-un calificó los lanzacohetes múltiples de 600 mm como piezas clave de su creciente arsenal de armas que supuestamente son capaces de destruir Seúl, la capital de Corea del Sur, si estalla otra guerra en la Península de Corea.
Dijo que es necesario inculcar aún más a los enemigos que si estalla un conflicto armado y una guerra, nunca podrán evitar consecuencias desastrosas. Llamó a su ejército a cumplir más a fondo su misión de bloquear y suprimir la posibilidad de una guerra con la constante y perfecta preparación para colapsar la capital del enemigo y la estructura de sus fuerzas militares.
Los lanzamientos de Corea del Norte se produjeron días después del final de los últimos ejercicios militares combinados entre Corea del Sur y Estados Unidos que el Norte describe como un ensayo de invasión. No estaba claro si Corea del Norte programó los lanzamientos con una visita a Seúl del secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, quien el lunes asistió a una cumbre sobre democracia y mantuvo conversaciones con funcionarios surcoreanos sobre la amenaza norcoreana.
Existe la preocupación de que Corea del Norte pueda aumentar aún más la presión en un año electoral en Estados Unidos y Corea del Sur.