El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aseguró este martes que la transición del poder y las elecciones serán “tersas” pese a la violencia electoral que hasta el momento ha dejado – oficialmente – 15 aspirantes asesinados rumbo a los comicios del 2 de junio.
“Esta transición va a ser muy tranquila, tersa, no va a haber ningún problema y también diría la elección”, expresó el mandatario en su conferencia matutina.
Sus declaraciones se producen a pesar del asesinato a balazos ocurrido el lunes de Bertha Gisela Gaytán, candidata de Morena a la presidencia municipal de Celaya, en Guanajuato.
Además, la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, reconoció este martes el asesinato de 15 aspirantes en el actual proceso electoral, que de forma oficial comenzó el primero de octubre pasado, además de haber recibido más de 100 solicitudes de candidatos que buscan protección de la violencia.
“Es muy doloroso lo del asesinato de ayer de la candidata en Celaya, duele mucho, pero vamos a salir, vamos a salir adelante”, argumentó el presidente.
López Obrador sostuvo que “hay diferencias importantes” entre la situación política y de violencia actual ante los sexenios anteriores, por lo que garantizó la estabilidad de la transición cuando deje la presidencia el 1 de octubre próximo.
“Una diferencia es que ya no predomina la asociación delictuosa como era antes, entre la delincuencia y la autoridad, ahora no se permite la impunidad y no establecemos relaciones de complicidad con nadie”, aseguró.
México tendrá los comicios más grandes de su historia el 2 de junio, cuando más de 97 millones de votantes están llamados renovar más de 20 mil cargos de elección popular, incluyendo la presidencia, nueve gobiernos estatales, los 128 escaños del Senado y los 500 diputados.