Los vecinos de la junta auxiliar La Resurrección, en la capital poblana, se armaron de valor y acudieron al lugar donde un grupo de talamontes llevaban a cabo sus acciones ilegales, una barranca ubicada en las inmediaciones de la colonia Santiago de los Leones.
Los colonos indicaron que fue desde 2022 cuando inició esta problemática en la que varias personas acuden a dicha zona que colinda con los límites de San Miguel Canoa, San Sebastián de Aparicio y La Resurrección a fin de cortar las especies arbóreas para después quemarlas por entre dos y tres días para recolectar el carbón y comercializarlo.
Acusaron que desde un principio buscaron ponerle freno a esta situación, sin embargo, los taladores aseguraron tener permiso de los dueños, aunque se trata de una barranca y es propiedad federal.
Aseguraron que aunque en varias ocasiones les han pedido frenar esta práctica, han hecho caso omiso, pues de repente se van a otras zonas, pero regresan a seguir con el corte de los ejemplares.
Por la mañana de este 22 de mayo, vieron que de nueva cuenta llegó una pareja en su moto y empezaron a cortar los árboles, por lo que pidieron apoyo de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC), no obstante, acudieron más personas con machetes y motosierras, con lo que amedrentaron a la policía municipal, quienes optaron por retirarse y los taladores continuaron con el derribo de especies arbóreas.