Meghan Markle ha estado en medio de la polémica desde que ella y el príncipe Harry decidieron poner fin a su relación con la realeza británica y renunciar, en 2020, a su posición dentro de la familia real para tener una vida normal en Estados Unidos con sus hijos Archie y Lilibet.
Desde entonces la exactriz se ha mantenido alejada del Reino Unido y emprendido distintos proyectos, desde podcast, fundaciones, hasta su línea de lujo American Riviera Orchard.
Markle ha brindado muchas entrevistas sobre cómo fue su paso por la realeza, y sobre estilo de vida, siempre en compañía de su esposo el príncipe Harry, sin embargo, ventilar su vida también le ha traído problemas y el rechazo de algunos sectores de la sociedad, quienes la han calificado de oportunista y de sacar provecho a lo que vivió siendo parte de la realeza.
Y aunque Meghan no la tuvo fácil durante su paso por la Corona, recientemente se sinceró y habló sobre su salud mental y del tipo de pensamientos sumamente negativos que llegó a tener ante la presión por ser parte de la familia real mientras estaba embarazada.
En una emotiva entrevista para CBS, Meghan Markle dijo que nunca había hablado a profundidad sobre sus problemas de salud mental en medio de las expectativas que la realeza tenía sobre ella.
Durante una conversación para The Parents’ Network, un programa lanzado por Meghan y el príncipe Harry, ambos intentan ayudar a los padres que perdieron a sus hijos directa o indirectamente a causa de las redes sociales.
Mientras hablaba sobre el acoso en línea y sus efectos en los niños pequeños, Markle habló sobre cómo su propia experiencia la conectó con estas familias.
“Cuando has pasado por cualquier nivel de dolor o trauma, creo que parte de nuestro viaje de sanación es poder ser realmente abierta al respecto, no he podido explicar en profundidad mi experiencia, pero creo que nunca querría que alguien más se sintiera así, que alguien más hiciera ese tipo de planes y que nadie le creyera”, dijo a Sunday Morning de la CBS.
En 2021, durante una entrevista con Oprah Winfrey, Markle, de 43 años, reveló que tuvo ideas suicidas mientras estaba embarazada de su hijo Archie debido a la presión de lidiar con la vida como miembro de la realeza y el trato que recibió a manos de los medios británicos.
La ex estrella de “Suits” dijo que simplemente no veía una solución a la gran cantidad de informes negativos sobre ella.
Ahora Meghan y Harry, quienes son padres del príncipe Archie, de 5 años, y a la princesa Lilibet, de 3, están trabajando para asegurarse de que otras familias no pasen por lo que ellos pasaron con The Parents’ Network.
La iniciativa, lanzada con la Fundación Archewell de la pareja, brindará apoyo a los padres cuyos hijos han sufrido los efectos nocivos de las redes sociales, han enfrentado daños casi fatales, han manejado dificultades continuas de salud mental o han experimentado la trágica pérdida de un hijo, según un comunicado de prensa.
Meghan agregó que espera que expresar su propio dolor, incluso si no profundiza en él, anime a otros a buscar ayuda, por lo que espera que sea un momento de enseñanza.